Nueva Ley sanciona con hasta $3 mil pintadas callejeras

En el marco de la sesión ordinaria, los diputados aprobaron de forma unánime el proyecto de ley que grava sanciones para cuando se manchen o ensucien edificios o lugares públicos -establecimientos educativos y hospitalarios-, estaciones y vagones de subtes o trenes en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires. Y cuando se afecten bienes de propiedad privada, la acción es dependiente de instancia privada, excepto en el caso de templos religiosos.

La norma fue aprobada por el pleno con 48 votos afirmativos y dos abstenciones de representantes del FIT y Seamos Libres.

Los legisladores establecieron que “quien mancha o ensucia por cualquier medio bienes de propiedad pública o privada, es sancionado con uno a quince días de trabajos de utilidad pública o 200 a 3.000 pesos de multa. La sanción se eleva al doble cuando la acción se realiza desde un vehículo motorizado o cuando se efectúa sobre estatuas, monumentos, templos religiosos, establecimientos educativos y hospitalarios, edificios o lugares públicos, estaciones y vagones de subterráneos o de trenes. En caso de que se trate de bienes de propiedad privada, la acción es dependiente de instancia privada, excepto en el caso de templos religiosos.

Autor de la norma, el diputado Oscar Moscariello (Pro) había propuesto incorporar el artículo 80 bis “Daño a monumentos” al Código Contravencional, en tanto su par Daniel Lipovetzky solicitó modificar el artículo 80 de la Ley 1472. En base a estas iniciativas, las comisiones de Justicia y de Asuntos Constitucionales se expidieron favorablemente y finalmente fue aprobado en el recinto.

El Cuerpo parlamentario modificó el artículo 80 del Anexo de la Ley N°1.472- Código Contravencional- el cual quedó redactado de la siguiente manera: “Varios edificios y lugares públicos son blanco continuo de ataques de vandalismo que van desde la rotura hasta las pintadas en los mismos, el más común de los ataques”, afirman los fundamentos. Explican que “a las pintadas que sufrió hace algunos meses y sufre nuestra Legislatura, se suma la de otros edificios y lugares públicos (…) a las clásicas leyendas de campaña política, se suman también la modalidad del graffiti como expresión urbana, los que afectan con mayor frecuencia a edificios o lugares públicos, estaciones y vagones de subterráneos y/o trenes”.

“Hoy, más del 70 por ciento de todas las formaciones de las seis líneas de subterráneos y el Premetro, como también de las líneas de trenes, están cubiertas con símbolos, dibujos, formas, letras y en algunas ni siquiera puede verse a través de las ventanillas” y “repintar los vagones de subterráneos cuesta entre $ 35.000 y $ 40.000 cada uno de ellos. Debido a lo oneroso que resulta la limpieza total de estos vagones, en la actualidad lo único que se realiza es mantener despejadas las ventanas del maquinista y el número de identificación de las formaciones, ya que es necesario ver la numeración por cuestiones operativas”.

Se indicó que la línea A del subte, con los clásicos vagones de madera que contaban con 100 años de antigüedad, fue la más afectada antes de su reinauguración donde de los 115 coches que tenía en circulación, el 90% poseían grafitis.

El diputado Daniel Lipovetzky afirmó que “la ley apunta a concientizar y ayuda a cuidar las escuelas, hospitales, edificios que son patrimonio de todos los habitantes de la capital”. Y agregó: “Desde la Legislatura tenemos la tarea de cuidar y proteger esta Ciudad, más que nada a un transporte fundamental como el subterráneo. Cada vez que hay que repintar los vagones a los porteños nos cuesta hasta $40.000”.

Fuente: Parlamentario

*

*

Top