Con la venia del Gobierno, el ministro de Finanzas, Luis Caputo, iría mañana al Congreso para responder sobre el abultado incremento de la deuda externa y dar explicaciones de sus vínculos con sociedades offshore radicadas en guaridas fiscales y sus negocios con el Estado argentino. Aunque desde el Ejecutivo también diseñaron la estrategia para tratar de evitar un mal trago para al ministro: esquivaron que Caputo sea interpelado en el recinto de la Cámara baja –como reclamaron el FpV-PJ y el massismo– y aceptaron la propuesta del peronismo “dialoguista” para que el ministro se presente ante la Bicameral de Seguimiento y Control de la Gestión de Contratación y de Pago de la Deuda Exterior. Una comisión que no ha sido conformada, cuya integración se realizaría el mismo miércoles –aun sin horario–, el mismo día que sesionará el Senado. El oficialismo quiere una reunión breve que no exponga al ministro a un interrogatorio opositor.
“Ratificamos absolutamente al ministro Caputo como ministro de Finanzas. Ratificamos su integridad, honestidad y transparencia en la función”, lo defendió el jefe de Gabinete, Marcos Peña, la semana pasada en su primer informe anual de gestión en la Cámara de Diputados frente al embate opositor que reclamaba la interpelación del ministro. En un giro inesperado, Peña admitió que “el ministro Caputo pueda concurrir aquí al Congreso, la semana próxima, a una comisión, para hablar tanto de las cuestiones de la deuda y su aplicación, como de las denuncias que se han hecho sobre su persona”. El salteño Pablo Kosiner, jefe del interbloque Argentina Federal, que responde al grupo de gobernadores peronistas, le allanó el camino al plantear que Caputo al menos concurra a una de las comisiones del Parlamento.
El ministro de Finanzas iría este miércoles ante la bicameral de seguimiento de la deuda externa. El oficialismo quiere que Caputo de sus propias explicaciones en una reunión acotada y con escasas posibilidades de preguntas.
Los bloques ya designaron a sus representantes para integrar la Bicameral, que se votó en marzo de 2016 junto a la aprobación del pago de la deuda a los fondos buitre, pero que jamás se conformó. Por la Cámara alta, Cambiemos designó a los senadores Ernesto Martínez, Pamela Verasay, Juan Carlos Marino y Ángel Rozas; mientras que Carlos Caserio, José Mayans, Sigrid Kunath y José Uñac lo harán por Argentina Federal; María de los Ángeles Sacnun (FpV) y el peronista salteño Juan Carlos Romero. En la Cámara baja, el oficialismo nombró a los diputados Eduardo Amadeo, Luciano Laspina, Miguel Bazze, Luis Borsani y Héctor “Toty” Flores; el massismo a Marco Lavagna; Javier David por Argentina Federal y José Luis Gioja, Axel Kicillof y Rodolfo Tailhade por el FpV-PJ.
Fuente: Página 12
