Mauricio Macri habló en conferencia de prensa por primera vez desde el inicio de la corrida. Convocó a un “gran acuerdo nacional” a todos los sectores con la idea de “acelerar” la reducción del déficit fiscal, al que definió como “el problema central” del país. Reconoció desajustes entre las distintas áreas del Gobierno para enfrentar las tensiones cambiarias y dijo que “pusimos metas demasiado optimistas”. Sin embargo, ratificó a su equipo económico.

“Es importante reconocer el momento de nerviosismo que vivió parte de la población”, comenzó el Presidente y rápidamente pasó al punto principal de su discurso: “El problema central es el déficit fiscal, que gastamos más de lo que tenemos. Nosotros tenemos que corregir lo que pasó estas semanas. Tenemos que acelerar”. ¿La estrategia oficial? “Hay que hacer un gran acuerdo para ver cómo vamos a superar este problema. Esta es una responsabilidad de los dirigentes”, planteó. Y adelantó que la propuesta será sentarse con gobernadores, legisladores de bloques opositores e incluso con la CGT para acordar un recorte del gasto e cara a la elaboración del Presupuesto 2019. “Si lo logramos, vamos a estar listos para cosas mayores”, sostuvo.

“Es aquí y ahora. Hay que acelerar”, repitió Macri varias veces. Y amplió: “Es hora de bajar el déficit. Ya bajamos 4 puntos el gasto en relación al PIB. Ahora tenemos que acelerar”. “Esta tiene que ser una etapa de pragmatismo, para hacer lo que es bueno para los argentinos. Por eso necesitamos un gran acuerdo”, enfatizó.

Autocríticas

Cuando se lo consultó por la respuesta del Gobierno a la embestida del mercado, admitió “problemas de coordinación entre el gabinete económico y el BCRA”. “Ahí tenemos que mejorar”, reconoció. Sin embargo, ante los rumores y reclamos de cambios en el Gabinete, ratificó en sus cargos a los integrantes del equipo económico: “Estoy muy tranquilo. Tenemos un muy buen equipo, que lo demostró esta semana”.

Además, el Presidente dijo que “por mi personalidad, por mi temperamento, yo he sido siempre muy positivo, muy optimista; y tal vez me puse metas ambiciosas y puse metas ambiciosas para todos. Pusimos metas demasiado optimistas y mucha gente se enojó con eso”.

Y justamente en cuanto a las metas afirmó que “vamos a delegar la baja de la inflación en el BCRA, como corresponde. Es fundamental bajar la inflación. Es una traba para el crecimiento, que es el principal objetivo de mi Gobierno”. “Ahora está en manos del BCRA. Y sin metas tan ambiciosas. Hay que ser coherentes con la baja del déficit y de la inflación”, agregó.

Asimismo, retomó los dichos del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne: “Ayer Dujovne dijo que con la devalución vamos a tener un poco más de inflación y un poco menos de crecimiento”.

FMI

En cuanto al acuerdo que busca el Ejecutivo con el FMI, Macri dijo que no va a condicionar su política económica. “Reducir el déficit es darle garantía de que podemos devolver el dinero que nos prestan. Ellos nos van a decir en qué número tenemos que bajarlo. Cómo lo hacemos es una decisión de nosotros. No nos tiene que incomodar. El Fondo es una institución seria con la que uno hace buenos o malos acuerdos”, aseguró.

Debates por tarifas

“Le digo al Congreso que se aprobó un presupuesto que está vigente. No se puede avanzar una propuesta que destruye el presupuesto que se aprobó. Esto es lo que hace que mucha gente dude de si de verdad estamos dispuestos a sacarnos la mochila que es el déficit fiscal”, interpeló Macri a los bloques opositores, que buscan aprobar en el Senado el proyecto que declara la Emergencia Tarifaria para retrotraer los precios de los servicios públicos a los montos de noviembre pasado. Sin embargo, evitó volver a anunciar un eventual veto presidencial en caso de que la oposición le dé sanción definitiva.

Fuente: El Economista