El Gobierno nacional descongeló las tarifas del gas luego de casi tres años y autorizó un aumento del 17% promedio a partir de marzo próximo. Según pudo saber Ámbito, los usuarios residenciales tendrán un incremento de entre 19% y 20%, como había anticipado el secretario de Energía, Darío Martínez, mientras que para las pymes será de entre 14% y 15% en la tarifa final.
La medida se oficializó este miércoles con la publicación del Decreto 91/2022 en Boletín Oficial, que establece ajustes para las empresas productoras y distribuidoras de gas de entre 36% y 70%, según el usuario. En la audiencia pública las compañías habían solicitado incrementos en las tarifas finales de entre 76% y 80% en promedio.
Sin embargo, la decisión final fue optar por otro camino, para evitar un mayor impacto inflacionario y para proteger el bolsillo de los usuarios y de las pequeñas y medianas empresas, que impulsan la producción nacional. Por eso, en el costo final del cliente residencial el 20% de aumento del gas se verá reflejado en un adicional de unos $300 por cada factura de $1.500, lo que marca una amplia diferencia con los pedidos de las distribuidoras y productoras.
“Nuestro Gobierno ha tomado la decisión de que las tarifas tienen que evolucionar por debajo de los salarios, lo importante es recuperar los salarios de los argentinos”, dijo Martínez, tras la oficialización del aumento, que según agregó, es producto de la Audiencia Pública y del del trabajo que hizo ENARGAS a cargo de Federico Bernal. “Lo que buscamos es que vuelva a crecer el porcentaje que pueda destinar un usuario a comprar bienes y servicios, ya que eso reactiva la economía y moviliza el mercado interno”, completó.
Los aumentos comienzan a regir a partir de marzo, pero se empiezan a pagar en abril. Las fuentes consultadas también advirtieron que ese aumento no se verá reflejado en las facturas de manera uniforme, ya que en algunos casos el período de consumo podría incluir días previos a la vigencia de los aumentos.
El Decreto 91/2022, de apenas 10 artículos y 11 Anexos, puso en vigencia los nuevos Acuerdos Transitorios de Renegociación – Régimen Tarifario de Transición entre las empresas, el Enargas y el Estado nacional. Estos Acuerdos habilitaron aumentos para las distribuidoras y productoras. Por ejemplo, Camuzzi recibió una adenda en el cargo fijo de 36% para residenciales, 35% para el servicio general P, 35% para GNC, 70% para Grandes Usuarios, 10% subdistribuidores y 50% para el servicio general G. Lo mismo se resolvió para las distribuidoras Metrogas, Naturgy Ban, Camuzzi Gas del Sur, Camuzzi Gas Pampeana, Distribuidora de Gas Cuyana, Distribuidora de Gas del Centro, Litoral Gas, Gas Nor y Gas NEA, y las transportadoras TGN y TGS.
El impacto en la tarifa final será variable para cada distribuidora, teniendo en cuenta que en el precio de la factura se tienen en cuenta cuatro factores: el precio del gas en boca de pozo, el transporte, la distribución y la carga tributaria, compuesta a su vez de impuestos nacionales y provinciales y tasas y contribuciones municipales. Los ajustes tarifarios que resulten de la combinación de esos cuatro factores se aplicarán luego de un virtual congelamiento de casi tres años, período en el que solamente hubo un aumento de 6% en mayo de 2021.
Pero al mismo tiempo habrá muchos usuarios que pagarán menos que el año pasado, incluso con la suba promedio del 20%. “Es muy importante destacar que, gracias a la Ley de Ampliación del Régimen de Zona Fría, aprobada el año pasado, un 35% de los usuarios residenciales (3,1 millones de usuarios o más de 10 millones de personas) registrarán este año un descuento del 28% en la factura de 2022. Este descuento lo recibirán incluso sobre esta actualización del 20%”, afirmaron desde el Enargas.
En la audiencia del 19 de enero, Metrogas (ciudad de Buenos Aires y sur del conurbano bonaerense) solicitó un aumento del 76,23% a partir de marzo, con tres opciones de aplicación. En la primera alternativa, aseguró que el impacto en la tarifa residencial sería del 33%, en la de usuarios comerciales del 24%, los industriales tendrían un ajuste del 3,44% y los usuarios de GNC un 3,01%. En la segunda propuesta, el impacto en la tarifa final sería del 35% para los residenciales y del 20% para los comerciales, en tanto los industriales y el GNC no tendrían cambios en relación con la iniciativa anterior. La tercera opción tendría un impacto en la tarifa final del 26% para los usuarios residenciales, 19% para los comerciales, 6,34% para los industriales y 2,37% para el GNC.
Naturgy Ban (norte de la provincia de Buenos Aires, incluyendo partidos del oeste y norte del conurbano) planteó un ajuste del 82,9% con un impacto final en la factura de los usuarios de un promedio de un 29%, sin hacer distinciones por categorías.
En la audiencia del 31 de enero la subsecretaria de Hidrocarburos, Maggie Videla, indicó que si se mantuvieran las tarifas de 2021, haría falta un desembolso adicional de $81.000 millones para este año, ya que el Estado cubre el 70,9% del costo total de la demanda prioritaria. De acuerdo con estimaciones de la Subsecretaría, ese 70,9% representaría este año un monto total de $ 216.365 millones, y como el proyecto de Presupuesto que no fue aprobado asignaba una partida de $135.000 millones, se necesitaría una erogación adicional de $81.000 millones. En cambio, si el Estado cubriera el 44,4% en vez del 70,9%, no harían falta partidas adicionales, de acuerdo con los distintos escenarios presentados en la audiencia. Videla precisó que el costo impositivo representa el 24% de la tarifa final, en tanto el costo del gas en promedio representa el 60%.
Desde el Enargas aclararon que esta adecuación tarifaria de transición que resulta de la aplicación de los mentados Regímenes Transitorios es parte del proceso de renegociación en el que se persigue arribar a tarifas “justas y razonables, accesibles y asequibles”, en los términos antes indicados, considerando lo dispuesto por el marco regulatorio.
Además, fuentes oficiales indicaron a este medio luego de los ajustes anunciados para el gas se trabajará en una ampliación de la segmentación de las tarifas de electricidad, que alcanzará a más cantidad de usuarios de los previstos inicialmente, en el estudio elaborado por el ENRE y el Conicet para el Ministerio de Economía.
Fuente: Ambito