Inspectores de Lealtad Comercial labraron más de 300 actas de infracción luego de encontrar alimentos fraccionados sin su rotulado obligatorio y otros vencidos en autoservicios y supermercados, durante todo el 2022. En la mayoría de los casos se trató de lácteos, fiambres y otros comestibles cuya comercialización incumplía la normativa vigente. Así, sacaron de la venta más de 4467 alimentos vencidos y sin información.
Según explicaron desde la gerencia de Inspecciones y Lealtad Comercial del organismo porteño, en promedio, en cada inspección donde se detectan irregularidades se registran entre 10 y 15 productos en situaciones similares. Este tipo de productos pueden encontrarse agrupados, como yogures con similar fecha de caducidad que siguen a la venta.
“Como establece la ley, todos los bienes y servicios deben ser comercializados en forma segura, es decir, sin causar perjuicio a la integridad física de los consumidores”, sostuvo Julia Domeniconi, secretaria de Atención Ciudadana y Gestión Comunal de la Ciudad.
“En su trabajo diario nuestros inspectores han labrado este año más de 1100 actas por incumplimientos de la legislación en comercios, cerca del 30% de estas infracciones son referidas a la venta de productos para el consumo y por eso tenemos que estar muy atentos”, continuó la secretaria.
Durante 2022, el número de sanciones se incrementó con respecto a los ejercicios anteriores sobre el incumplimiento del artículo 5º de la Ley 24.240 de Defensa al Consumidor, que indica que los productos no deben presentar un riesgo para la salud, como es el caso de aquellos comestibles vencidos.
La resolución nacional 146/2004 obliga a quienes comercializan productos fraccionados a informar mediante rotulado la fecha de envasado y de vencimiento, lote y marca del producto, entre otras informaciones.
“Lo primero que verificamos son las góndolas de lácteos, y dentro de este sector, con especial detenimiento en los destinados al consumo infantil, como yogures o leches para la primera infancia” explicó Vilma Bouza, directora de Defensa al Consumidor, y agregó: “Aunque se clasifiquen como de larga vida, muchas veces en algunos autoservicios puede ocurrir que estos productos estén vencidos”.
“Las principales infracciones las encontramos en las góndolas de autoservicios que fraccionan quesos y fiambres, por ejemplo, presentan los 100 gramos de lomito, jamón o salame cortado en una bandeja listo para llevar”, comentó Jorge Surín, gerente de Inspecciones y Lealtad Comercial de Defensa al Consumidor.
Según las actas, un 70% de los incumplimientos refieren a productos fraccionados no rotulados, como fiambres, quesos o dulces de batata o membrillo sin información correcta que identifique lote y fecha de vencimiento. Dentro del 30% restante, se pueden encontrar predominantemente leches y yogures vencidos.
Las multas para los infractores van desde los 8500 hasta los 850 millones de pesos, acorde a la normativa vigente. El promedio aplicado a este tipo de infracciones ronda entre los 50.000 y los 200.000 pesos, según la envergadura del comercio.
Fuente: La Nacion