En rueda de prensa en el Palacio de Hacienda, destacó que la capacidad ociosa de Casa de Moneda, bajo la anterior presidencia del Banco Central, llegó hasta un 50%.
Afirmó que la intervención permitirá asegurar la continuidad de las operaciones de la empresa, preservar su patrimonio y las fuentes de trabajo en el período de transición hacia la expropiación, que comenzará a ser analizada en un plenario de comisiones en el Senado.
“La intervención tiene por objetivo asegurar la continuidad de las actividades, preservar activos, patrimonio y garantizar a los trabajadores los derechos laborales, afiliación gremial y vigencia del convenio colectivo de trabajo”, señaló Lorenzino.
En una conferencia de prensa, remarcó en diferentes oportunidades que el objetivo de fondo es “reforzar y mejorar las capacidades de Casa de Moneda y asegurar para el país la producción de sus billetes y papeles de seguridad en activos en poder del Estado”.
Apuntó el ministro que las comisiones de Presupuesto y Asuntos Constitucionales del Senado comenzarán a debatir el proyecto de expropiación de la empresa enviado por el Ejecutivo Nacional.
Lorenzino remarcó que la decisión de la presidenta Cristina Fernández de intervenir y expropiar, es el “primer paso para revertir un plan sistemático para desguazar a Casa de Moneda”.
Destacó que la capacidad ociosa de Casa de Moneda, bajo la anterior presidencia del Banco Central, a cargo de Martín Redrado, llegó hasta un 50%