Todos los consorcistas o administradores de edificios de la Ciudad que tengan ascensores, montacargas o escaleras mecánicas deberán completar un censo obligatorio online y pagar una tasa de $ 250 anual por cada aparato, dinero que se usará para solventar un sistema de controles que asegure que los ascensores están correctamente mantenidos por una empresa especializada. Este nuevo costo seguramente haga que aumenten las expensas.
Así se lo confirmaron a Clarín en la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad (AGC), donde además explicaron que este sistema estará vigente dentro de aproximadamente un mes.
La medida se aplicará por primera vez este año. En el artículo N° 23 de la Ley Tarifaria sancionada por la Legislatura en diciembre pasado se establece el cobro de los $ 250 “por el servicio de verificación de funcionamiento y mantenimiento de ascensores y montacargas”. En la AGC informaron que están analizando si este año cobran el total de la tasa o un proporcional por los meses que faltan hasta el año entrante, donde sí se pagaría el monto completo.
La normativa vigente establece que todos los ascensores deben ser revisados periódicamente por una empresa especializada que esté registrada en la Ciudad (hay unas 700). Pero el Gobierno porteño no tiene aún un sistema de verificación para determinar si todos los edificios lo cumplen, o bien si las firmas encargadas hacen su trabajo como corresponde. El último antecedente fue de 2003, cuando la Ciudad implementó un sistema de obleas con los colores del semáforo, que debían ser pegadas en el ascensor a la vista de quienes lo usaran, pero en la AGC reconocieron que ese método se desechó hace ya varios años porque no era efectivo.
En la AGC adelantaron que todo el trámite se hará online y en forma sencilla. El administrador del edificio deberá ingresar en una página web y llenar un formulario en el que se le preguntará la dirección del edificio y cuántos ascensores, montacargas o escaleras mecánicas tiene. Luego se le abrirá una opción para imprimir la boleta de la tasa: aún no está definido cómo se podrá pagar, aunque es muy probable que se pueda hacerlo en las sedes comunales, el Banco Ciudad o incluso se podrían habilitar métodos electrónicos.
Tras haber pagado, el administrador deberá ingresar otra vez en la web y cargar los datos de la boleta. El sistema le abrirá entonces la opción para imprimir una oblea con un código QR (similar a la que les da la AFIP a algunos comercios), que deberá ser colocada en el ascensor. Cualquier persona con un teléfono inteligente o dispositivos similares habilitados para leer este tipo de códigos podrá en el momento ver qué empresa es la encargada del mantenimiento de ese aparato.
Una vez completado este registro, la AGC constatará con la empresa señalada realmente se ocupa de ese ascensor. En caso contrario, podrá enviar un inspector o intimar al consorcio o los responsables del edificio para que contraten una firma que se ocupe del mantenimiento. Por otra parte, si un edificio no declarara sus datos podría sufrir una inspección. Los hoteles, shoppings y otros establecimientos están incluidos.
La necesidad de que los ascensores estén correctamente mantenidos y cumplan con las medidas de seguridad es una obviedad. Según un informe de la Federación de Asociaciones y Cámaras de Ascensores de la República Argentina (FACARA), en los últimos diez años se produjeron en la Ciudad 250 accidentes con ascensores, de los cuales el 48% sucedieron por falta de mantenimiento del equipo (32 % por deficiencias en los sistemas de seguridad y 16 % por fallas de la instalación eléctrica).
El pago de la tasa, además del abono a la empresa de mantenimiento, lo deberá cubrir el consorcio con lo que recaude por expensas. Y aquí aparece un problema: por más que $ 250 por año por ascensor pueda parecer poco, hoy los consorcistas sufren ante cada nuevo costo, porque las expensas están muy altas, por la inflación y los aumentos salariales a los encargados de edificios.
Fuente clarin