La presidenta Cristina Fernández anunció esta tarde que, a partir del 1 de setiembre, dejarán de pagar el impuesto a las Ganancias los trabajadores que cobren hasta 15 mil pesos brutos. A su vez, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, informó que, para quienes perciban salarios desde 15.001 brutos hasta 25.000, elevarán el mínimo no imponible un 20%, excepto para los trabajadores en relación de dependencia de la “Patagonia amplia” -aclaró- (desde La Pampa hasta Tierra del Fuego), donde la suba del mínimo para esa franja salarial será del 30%.
La jefa de Estado se reunió con empresarios en la Casa Rosada y dejó los detalles de los anuncios a dos funcionarios: Ricardo Echegaray, titular de la AFIP, y Diego Bossio, director ejecutivo de la ANSES.
En primer lugar, Ricardo Echegaray informó que, mediante una deducción especial, no tributarán el impuesto a los altos ingresos aquellos trabajadores en relación de dependencia que cobren menos de $ 15 mil brutos por mes, sin distinción para casados o solteros. El funcionario también anunció que se subió un 20% el mínimo no imponible para aquellos que cobran entre $ 15.0001 y 25.000 brutos mensuales.
Como excepción, el titular de la AFIP indicó que el mínimo no imponible de ese impuesto subirá un 30% en la Patagonia “amplia”, porque quieren equiparar el poder adquisitivo de los trabajadores del sur en relación al resto del país.
Con estas nuevas disposiciones, el 89,8% de los trabajadores en relación de dependencia no pagará Ganancias y sí lo harán el 10,2% de los empleados.
En otro tramo de los anuncios, el funcionario de la Agencia recaudadora indicó también que el 99,3% de los jubilados quedan exentos del pago del impuesto, y que solamente un 0,7% del total tributará Ganancias.
La preocupación por la manera de financiar estas nuevas modificaciones motivó otra serie de medidas que absorberán el impacto en la recaudación. En este sentido, Echegaray indicó que quisieron evitar gravar con impuestos “los ahorros” y el comercio de acciones que cotizan en bolsa, porque prefieren impulsar y desarrollar las inversiones en la economía real.
Por eso, la manera que encontró la administración nacional de compensar los caudales de recaudación fue impulsar dos nuevos gravámenes. El primero será de un 15% sobre el comercio de acciones que no coticen en la bolsa y el segundo un 10% sobre el reparto de los dividendos de las empresas.
En total, quedarían fuera del régimen del impuesto a las ganancias 1.497.768 personas, lo que representa una reducción del 40% con respecto a los casi 2,5 millones que tributan hasta hoy.
La exención del pago del impuesto, remarcó el titular de la AFIP, significa un ‘esfuerzo fiscal‘ cuatrimestral de 2.581 millones de pesos para las cuentas del Estado.
Fuente: El Cronista