La advertencia de multar por ley con hasta un millón de pesos a los legisladores que se pasen de bancada de nada sirvió para frenar a un grupo de macristas que en las últimas horas se abrazaron al massismo. “Por qué me voy del PRO”, tituló la diputada provincial Nancy Monzón al texto que difundió para justificar la reciente borocotización.
“Hubo una constante de fracasos: políticas erráticas que nos llevaron a un gran derrumbe partidario por no poder (o querer) sellar alianzas estratégicas que se proyectaran más allá de una elección”, sentenció Monzón al escribir el mensaje, que luego hizo público.
“El partido a nivel provincial es manejado a piaccere por unos pocos que prefirieron priorizar su carrera política por sobre el conjunto de dirigentes capaces y militantes comprometidos”, completó. El acuerdo Macri-Massa ya había generado contrapuntos en los máximos referentes del PRO.
Detrás de la arrecifeña de 52 años, exestudiante de Letras y actual representante de la 2º sección electoral, se fugaron el porteño devenido en matancero, Juan Carlos Piriz, el exintendente de Monte Hermoso, Rodolfo Di Pascuale y el platense Julio Garro. Esas cuatro incorporaciones al Frente Renovador permiten al intendente de Tigre poseer antes de las legislativas de octubre la segunda minoría en la Cámara baja bonaerense, detrás del kirchnerismo-sciolismo. Al cuarteto PROperonista se les vence los mandatos en diciembre.
El bloque del FpV, que conduce el diputado Juan De Jesús, queda hoy con 37 miembros; el Frente Renovador, que antes tenía siete integrantes ahora pasó a 20; la bancada del PRO Peronismo se redujo a cuatro; el de la UCR, a cinco; los radicales del Pueblo, cuatro, y la CC-ARI, tres.
Además de macristas, al FR se sumaron también el radical Walter Carusso (aliado del intendente de San Isidro, Gustavo Posse), Ricardo Filpo y Valeria Arata, y de la Coalición Cívica, Pedro Simonini. También se incorporaron Ricardo Lissalde, que tenía hasta la fecha el monobloque Alternativa Peronista, y del Frente para la Victoria Franco Caviglia (cercano al intendente de Almirante Brown y candidato a diputado nacional del Frente Renovador, Darío Giustozzi), Patricia Rocca (aliada del también postulante Felipe Solá) , Raúl Pérez y Jorge Scipioni, de la agrupación sciolista La Juan Domingo.
Monzón explicó que eligió los brazos de Massa porque el país y la provincia de Buenos Aires “necesitan de un nuevo liderazgo compartido, sin ataduras, capaz de escuchar, convencer y generar consensos”. Al pegar el portazo en la cara a Mauricio Macri y a Francisco De Narváez, la diputada también se ilusionó con que Massa dará “espacio a las distintas expresiones políticas que conducirán los destinos de los Estados por sus capacidades profesionales y humanas, y ya no porque ‘el dueño de la lapicera’ así lo determine”.
“Estamos comprometidos en reconstruir los puentes que nos unan de nuevo con la sociedad, con sus problemas, con sus anhelos y sus esperanzas. Eso representa el espacio liderado por Sergio Massa: recuperar la esperanza”, consideró. “Deposito mis esperanzas en el liderazgo moderno y republicano de Sergio”, concluyó la legisladora.
Fuente: Ámbito Financierp
