El ministro de Finanzas de Grecia, Yannis Stournaras, aseguró hoy que su país vivirá un “infierno” hasta junio de 2014, debido a las negociaciones con los acreedores internacionales en búsqueda de más financiación para hacerle frente a su crítica situación.
“Hasta junio será un infierno. Nuestros acreedores revisarán y juzgarán todo”, declaró el al semanario To Vima.
En declaraciones al diario liberal Kathimerini, el ministro adelantó también que Grecia rechazará un nuevo plan de apoyo si a cambio tiene que adoptar medidas de austeridad adicionales.
Estas declaraciones denotan la creciente preocupación del Ejecutivo griego por el resultado de las negociaciones con los acreedores de Grecia (UE, BCE, FMI) para encontrar soluciones a las necesidades financieras del país cuando concluya el segundo plan de rescate, en julio de 2014.
La prensa griega dio cuenta de esta angustiante situación. La publicación To Vima, de centroizquierda, habla de un “thriller sobre la deuda” y describe a Grecia como “rehén” del “juego” entre las tres instituciones acreedoras, mientras que el liberal Kathimerini subraya los “días angustiosos” que vive el gobierno de coalición conservadores-socialistas de Antonis Samaras “bajo la amenaza de nuevas medidas”. Por su parte, el diario popular de centroizquierda Ethnos se trata del “chantaje de la troika” por el nuevo memorando de austeridad.
Grecia viene implementando desde hace tres años un duro plan de austeridad, que han dejado al país sumido en una crítica situación económica, y el Gobierno indicó que no quiere implementar más ajustes.
Las diferencias con los acreedores también refieren a la suerte de la deuda pública griega. Los europeos y el FMI han concedido 250.000 millones de euros en préstamos a Grecia en dos etapas (2010 y 2012), lo que ha disparado la deuda al 175% del PIB este año, contra el 133% en 2010.
Fuente: El Cronista