Es cierto: el fallo de la Corte no puso punto final a todos los conflictos. Y ayer, precisamente, quedó planteado el primero de los nuevos y muchos problemas que surgirán durante la aplicación de la ley de medios. En efecto, el titular de la Afsca. Martín Sabbatella, y el Grupo Clarín comenzaron a discutir quién tiene el derecho de decidir cuáles son las licencias de TV y radio que se pretenden vender y cuáles no.
Eso es lo que buscó la presencia de Sabbatella en la sede del multimedios, donde notificó que avanzará con la aplicación de la resolución la Afsca 2206, de diciembre último.
Al margen de la indudable intención del funcionario de escenificar ante las cámaras de TV el triunfo político que la Corte Suprema le dio al Gobierno, Sabbatella intentó dejar en claro que será el Estado el que pretenderá tomar esas decisiones. El Gobierno quiere ser el que decida si se debe desinvertir, por ejemplo, Cablevisión, Canal 13 o TN, por citar algunos ejemplos.
La resolución 2206 de la Afsca es un mecanismo que comienza con la presentación de Sabbatella, que además quiso aprovechar una constatación de licencias que había realizado meses atrás.
Pero los abogados de Clarín -durante la reunión que mantuvieron con el funcionario y sus colaboradores alrededor de una larga mesa blanca- le recordaron que la Sala III de la Cámara Federal Civil y Comercial declaró nula aquella actuación, un tema que pronto llegará a la Corte. Por eso, por las dudas, Sabbatella dijo que tenía que empezar el procedimiento de cero.
Según la citada resolución de la Afsca, ahora Clarín tiene 15 días para responder a esta notificación: allí deberá indicarle al organismo todas las licencias que posee, cuáles explota y cuáles no y, además, cuáles son los bienes afectados a ellas.
Luego, con esa información, el Tribunal de Tasación de la Nación fijará el valor de cada una de las licencias de medios, tras lo cual la Afsca pretenderá decidir cuáles le interesa transferir. Y, finalmente, llega el concurso para venderlos.
Obviamente, el Grupo Clarín no está dispuesto a consentir que el Gobierno avance por ese camino y pretenderá que todavía hay un margen para presentar un plan de adecuación voluntaria.
Por eso todas las presentaciones que realice el Grupo Clarín avanzarán en esa dirección: darle a la empresa un margen amplio de decisión. Para Clarín, el procedimiento de ayer es “ilegítimo”. Una cosa es que la Corte haya dicho que la ley de medios es constitucional y otra, distinta, cómo se hará la desinversión.
El Grupo Clarín, por otra parte, también afirma que se le deben respetar las mismas condiciones que tuvieron otros grupos para presentar voluntariamente sus planes de adecuación: luego de vencido el plazo de un año, iniciar el proceso de desinversión que fija el artículo 161 de la ley; los demás grupos (Moneta, Vila-Manzano y otros) tuvieron otro año adicional.
“Un atropello”, según la firma
El Grupo Clarín rechazó en un comunicado el método de “adecuación de oficio” que encaró la Afsca y calificó de “grave atropello” la notificación de Sabbatella para avanzar en un procedimiento “forzoso, cuando esto es abiertamente ilegal”. Recordó que esas normas fueron “suspendidas para la compañía a raíz de la medida cautelar”
Fuente: La Nación