Cuando apenas comenzaron las primeras reuniones preliminares del debate por el proyecto de Presupuesto 2014 para la Ciudad de Buenos Aires, la polémica ya empieza a crecer por la propuesta de subir distintos impuestos que involucran a los automóviles.
Pese a que la administración de Mauricio Macri se había comprometido a que sólo el ABL sufriría modificaciones, el proyecto presentado por el gobierno porteño prevé que todas aquellas personas que el año próximo compren un vehículo cero kilómetro paguen entre 1% y 3% más por el Impuesto a los Sellos.
“Los legisladores de distintas bancadas decidieron subir ese gravamen para intentar financiar el transporte público”, argumentó Antonio Campos, legislador radical e integrante de la Comisión de Presupuesto, en diálogo con El Cronista Comercial. La semana pasada, la Justicia autorizó a que el gobierno porteño suba de $2,50 a $3,50 la tarifa de los subtes.
El documento presentado por el PRO también contempla una modificación en la tasa que se paga por Patentes. Aunque el gravamen se mantendrá en 3,2% para los vehículos de una valuación de hasta $150.000, quienes tengan automóviles de entre $150.000 y $200.000 pasarán a pagar 4%; entre $200.000 y $300.000, 4,5%, y quienes superen esa cifra abonarán un cinco por ciento.
A su vez, la propuesta incluye un cambio estructural en el Impuesto sobre los Ingresos Brutos. Las terminales se verán beneficiadas con una disminución de 7% a 5%. Las concesionarias, en cambio, serán las más afectadas: para la venta de autos al por menor la alícuota que pagan por el tributo se irá de 3,5% a 15%, de acuerdo con el artículo 63 inciso 29 del proyecto.
Fuente: Infobae