El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, advirtió otra vez ayer que las empresas prestadoras del servicio eléctrico deberán responder económicamente por su responsabilidad en los cortes de electricidad que persistieron en los días festivos y reiteró que la continuidad de los contratos “puede peligrar” en caso de graves infracciones.
El funcionario agregó que “una vez que concluya esta contingencia” climática, las compañías del sector deberán abonar compensaciones especiales en casos de usuarios que hubieran sido afectados por cortes de energía en temporadas anteriores.
En diálogo con la señal televisiva de cable C5N, De Vido hizo hincapié en el contexto de las altas temperaturas que afectaron la provisión de energía en la región metropolitana durante las jornadas recientes. Según el ministro, ayer la cifra de consumo se acercó al récord de los 24 mil megavatios.
En paralelo, el titular del Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, apuntó también contra Edenor y Edesur. Desde Chubut, donde asistió a la firma de un acuerdo hidrocarburífero, el funcionario aseveró que la reestatización del servicio es “una de las hipótesis de trabajo” del gobierno como también “la posibilidad de la transferencia directa a la provincia de Buenos Aires y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
De Vido explicó que el Estado impulsará “una liquidación de todas las infracciones cometidas por las empresas” y adelantó que parte de esa medida será la ejecución de un sistema de repago “para la gente que sufrió consecuencias”. En concreto, se trata de una compensación económica para cada usuario al que se le haya cortado el servicio “más allá del castigo o sanción o multa que sufrirá cada empresa”.
Los usuarios que hayan tenido cortes en temporadas anteriores percibirán compensaciones superiores a las que recibieron tras los cortes de años anteriores. Todos los montos de las compensaciones resultarán de negociaciones entre el Estado, los directivos de las empresas y los trabajadores. “Después vendrá una evaluación final del problema”, adelantó De Vido, quien aprovechó para recordar declaraciones “taxativas” de Capitanich: “Si los incumplimientos fueron graves puede peligrar el contrato de concesión.”
“Algunos medios dicen ‘el ministro habla de crisis’ pero yo digo que en una contingencia como esta hay que ser solidarios con el uso de la energía”, afirmó De Vido, antes de formular un pedido de “disculpas a los usuarios” y un llamado a buscar un uso racional de la energía.
Fuentes oficiales explicaron que las empresas serán las responsables de ejecutar los pagos de todas las compensaciones y que el sistema será similar al aplicado en otras oportunidades. Así, se prevé que los afectados podrán optar por resarcimientos en energía o en dinero.
La fuente consultada por Tiempo Argentino admitió que la rescisión de los contratos es una posibilidad que se afirma: “Si bien es cierto que hay una ola de calor anómala, nosotros entendemos que las empresas están demorando mucho la devolución del servicio.”
El vocero consultado agregó que el retiro de las licencias “es una alternativa porque hay incumplimiento de las prestadora y un cambio en las tarifas no es una posibilidad”. El contacto con las privadas, según la fuente, es fluido. El Estado, agregó, “sigue controlando la salida de las cuadrillas a la calle” si bien la posición oficial “está centrada en que la respuesta la tienen que dar las empresas”.
Tras las declaraciones de De Vido, las empresas eligieron la moderación. En Edesur expresaron que la empresa “no va a referirse a las opiniones de los funcionarios”, en tanto aseguraron que la compañía “sigue atendiendo todas las faltas de suministro que se originan” y que la idea es que el servicio esté normalizado “lo más rápido posible”.
En la previa de la Navidad, las empresas tuvieron que reconocer que la posibilidad de nuevas interrupciones en el corto plazo era lo más probable. Ayer, en diálogo con Tiempo, la vocera de Edesur, Alejandra Martínez, dijo que hubo “casos puntuales” de cortes que repercutieron en un acuerdo con AySA para garantizar el abastecimiento de agua en los tanques de los edificios porteños. Edenor por su parte adoptó un perfil todavía más bajo y no respondió consultas.
El silencio de Edenor coincidió con que ayer se publicó en el Boletín Oficial la Resolución 370 que convocó a una audiencia pública donde se le entregará el certificado de conveniencia y necesidad para la construcción de la subestación Gaona y de un electroducto subterráneo que vinculará la nueva subestación con la línea de alta tensión La Reja – Malvinas. A la par, se publicó la Resolución 371 que convoca a otra audiencia pública para tratar la ampliación que realizará en la vinculación entre las actuales subestaciones Suárez y Villa Adelina.
Los dichos de Capitanich en Chubut, a última hora de ayer, sintonizaron con las declaraciones del titular de Planificación. En un contacto previo con este diario voceros del jefe de Gabinete eligieron “no hacer comentarios porque es un tema que lleva el Ministerio de Planificación”. El jefe de Gabinete había tenido fuertes conceptos para con las compañías de electricidad, a las que puso en el centro de los responsables por los cortes de luz que afectaron a distintos puntos del territorio metropolitano.
De Vido, por su parte, ratificó que el gobierno seguirá velando para que las empresas distribuidoras cumplan “con el contrato de concesión y resolver los problemas” de cortes de energía que sufren sectores de la población. Desde “1970 la región metropolitana no padecía una ola de calor” semejante, insistió De Vido al problematizar el factor climático y destacar en esa línea el trabajo de colaboradores del Ministerio de Planificación en la atención de los usuarios.
“Desde el Ministerio de Planificación intentamos dar una respuesta a los usuarios a través de personas con nombre y apellido. Yo le pido a la gente que confíe en nosotros y nos llame”, agregó el funcionario en medio de esta sofocante situación y los cortes de luz que se sucedieron en diversos barrios de Buenos Aires y del cinturón urbano bonaerense.
Fuente: Tiempo Argentivo