Empresarios de la cadena cárnica atribuyeron ayer el incremento del precio de la carne a problemas climáticos, los cuales interrumpieron la distribución normal de la hacienda. Estimaron que el precio bajará 10 por ciento, cuando se normalicen la fuertes lluvias en la zona pampeana que dificultan el transporte del ganado. A su vez, apuntaron contra los controles de la Secretaría de Comercio de Augusto Costa, por continuar las políticas del ex secretario Guillermo Moreno. El Gobierno puso el ojo en este sector porque, tras la devaluación de enero, el precio al consumidor de productos cárnicos anotó un incremento del 20 por ciento. El Gobierno aseguró que estas subas fueron injustificadas, puesto que el tipo de cambio tiene poco impacto en la estructura de costos sectorial.
“Deberá calmarse el señor secretario y esperar a que mejore el clima, ya que a partir de la normalización del abastecimiento los precios al público se van a retrotraer, dado que el bolsillo del consumidor –luego de la devaluación y de la inflación de diciembre, enero y febrero–, no va a poder convalidar los actuales valores en el mostrador. Estimamos un retroceso de los precios cercanos a 10 por ciento”, dijo Ciccra, entidad que agrupa a productores y comerciantes de carne y derivados.
Las declaraciones del sector resultan contradictorias para los consumidores. Pese a haber incrementado los precios en el mismo nivel que la devaluación, apuntaron contra la Secretaría de Comercio. “Tal vez sea hora de que la regulación de la cadena de valor de la carne se deje en manos de profesionales y expertos que conocen el sector y que puedan dar con soluciones acordes a la realidad”, indicaron.
Fuente: Página 12