El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, recibió a directivos de las cámaras que componen toda la cadena industrial del sector automotriz, que en 2013 registró un déficit de 9.978 millones de dólares.
Del encuentro participaron los presidentes de las entidades empresarias ADEFA, Enrique Alemañi; de AFAC, Fabio Rozemblum; el Gerente General de FYDREM, Rodolfo Scaclione; junto a los representantes de CAMYM, Maximo Tezza y CFHIM, Miguel Solimando y Emilio Etchegorry. También estuvo presente la ministra de Industria, Débora Giorgi.
En el sector había expectativas de que se hablara sobre una posible modificación al impuesto de autos de lujo, que afecta a los vehículos de más de $170.000 libre de impuestos. Estos autos sufrieron luego de la aplicación de la medida una caída en las ventas que en algunas marcas premium llegó a casi el 70%. Además, debido al aumento de precios, cada vez más modelos podrían estar impactados por el gravamen.
Sin embargo, fuentes del sector aseguraron que el punto no estuvo incluido en la agenda del encuentro, aunque el jefe de Gabinete aseguró que el Gobierno seguía la evolución del mercado automotor.
Sí se estudió la posibilidad de empezar a trabajar en mesas conjuntas para abordar temas sensibles para el sector, como ser las importaciones de autopartes que componen luego los vehículos fabricados en el país.
Capitanich destacó que en el sector automotriz hubo “un incremento equivalente a casi un 368 por ciento en los niveles de producción en los últimos años”. Además, habló de “un déficit de balanza comercial derivado de la importación de autopartes”, pero aclaró que “la República Argentina ha experimentado un avance desde 169.000 unidades a casi 800.000 unidades de producción nacional, y obviamente casi 1 millón de unidades cuando se tienen en cuenta otras que se han importado para satisfacer las demandas del mercado interno”.
Asimismo, destacó que “el 16 por ciento de la producción se exporta y gran parte de lo que se exporta, cerca del 86 por ciento, es con destino a la República Federativa del Brasil”.
Fuente: Ámbito Financiero