Integrada definitivamente en el espacio orgánico del kirchnerismo, a través de Unidos y Organizados, la legisladora Claudia Neira, abogada especializada en seguridad y cuestiones de género, está convencida de que el caso Ciccone está siendo aprovechado por la oposición y los medios, que el oficialismo llama “hegemónicos”, para “atacar un proyecto político”.
Lo explica: “Nosotros nunca pedimos la renuncia de Macri, a pesar de su doble procesamiento. Y no lo hicimos porque queremos ganarle las elecciones. Si la oposición hace un discurso sobre el respeto a las instituciones, entonces que sean coherentes y no prejuzguen. No prejuzgar vale para el kirchnerismo también y es parte del respeto a los tiempos institucionales”.
En 2013 formalizó su alejamiento del Frente Amplio Progresista (FAP) para integrarse plenamente en el oficialismo. En su momento, explicaba aquella ruidosa ruptura así: “Son expresiones que confunden su lugar histórico, que tiene que ver con expresiones populares, latinoamericanas y que, al no encontrar un espacio político, porque claramente ese espacio está protagonizado por el kirchnerismo, fueron girando a la derecha sin poner el guiño y fueron ocupando el espacio del antikirchnerismo virulento, que un día te junta con el Momo Venegas y otro día con Binner y el caprilismo”.
Desde el oficialismo, apuesta a que el kirchnerismo encuentre a su propio candidato presidencial, aunque, asegura, no le gustaría ver a Daniel Scioli del lado de Magnetto.
“Queremos tener una relación de respeto con los medios (NdR: Se refiere a los “hegemónicos”), pero eso en el caso de algunos, que son actores políticos, no nos ha sido posible. La opción que se nos presentó es someternos a sus intereses o confrontar. Y en ese dilema, elegimos la confrontación.”
–Pero, en el caso de Boudou, ¿no les interesa saber la verdad? ¿No hablaría mejor del proyecto político si aceptaran depurar las posibles redes de corrupción, en lugar de protegerlas?
–Lo que nosotros estamos viendo es que se está aprovechando el caso Ciccone para atacar los avances del kirchnerismo; es decir, los logros de un proyecto político. Los medios están haciendo un circo con el tema. O algunos medios, mejor dicho. La oposición también. Incluso, hay legisladoras macristas que se apuran a pedir renuncias cuando la Justicia no se ha expedido todavía. Nosotros nunca le pedimos la renuncia a Macri, a pesar de su doble procesamiento. Entonces, nos resulta contradictorio el discurso de defensa de la institucionalidad y al mismo tiempo no respetar los tiempos de la Justicia. Podemos criticar al Poder Judicial, pero debemos esperar a que se expida para saber si Boudou es o no culpable.
–¿Qué legisladoras macristas pidieron la renuncia a Boudou?
–Laura Alonso, Patricia Bullrich y Graciela Ocaña.
–Pero Ocaña no es macrista.
–Pero es aliada. Bueno, tal vez es una lectura política mía. Que ella actúa en alianza con Pro.
–¿Cómo sigue el kirchnerismo después de 2015? ¿Scioli puede ser un continuador?
–Mi sensación es que le hace mal al kirchnerismo hablar de nombres ahora. Hoy se está debatiendo mucho adentro, junto con personalidades diversas, intelectuales del oficialismo a quienes invitamos a los plenarios y con quienes estamos reflexionando de cara al futuro. El desafío es cómo avanzamos un escalón más en la economía o en otras políticas que son fundamentales. Nosotros tenemos que ser capaces de generar un candidato propio: el futuro del proyecto será lo que nosotros mismos seamos capaces de construir. Como dijo la Presidenta días pasados: no hay revolución sin pueblo.
–¿Entonces descarta a Scioli como continuador?
–Falta mucho para 2015. Mi sensación es que Scioli no representa lo más avanzado del kirchnerismo, aunque está dentro de nuestro espacio. No me gustaría verlo irse con Magnetto. Tenemos que dar un debate y proponer diversos caminos. Pero si Unidos y Organizados decide que sea Scioli, vamos a acompañar.
–¿Qué rol tendrá Cristina después de 2015?
–El de conductora estratégica. Pero habrá una reconfiguración de lugares.
–Usted se especializa en seguridad, un tema en el que el oficialismo ha tenido un serio déficit. ¿Por qué el Gobierno no diseñó una política integral, a pesar de que la seguridad está al tope de los reclamos de la gente?
–Con el tema seguridad no hay magia. Y no comparto que el kirchnerismo no tenga política de seguridad o que no invierta. Desde 2003 hasta la fecha, ¿sabés cuánto se invirtió en seguridad, a nivel nacional?
–Dígamelo usted.
–La inversión se incrementó en un 900 por ciento. Se creó un Ministerio de Seguridad, antes no había. La Asignación Universal por Hijo construye justicia social y, por ende, también seguridad a largo plazo. En la Ciudad, la Nación tiene 1.000 cámaras monitoreadas, no como Macri que puso cámaras que nadie coordina.
–¿Y por qué cree que no se percibe toda esa inversión?
–Porque tenemos problemas en comunicarla. Si te fijás, la Metropolitana no tiene mejores logros que nosotros. Los Estados Unidos, en el tema narcotráfico, tampoco. Te diría que nosotros hemos tenido más éxito que los Estados Unidos en el combate al narcotráfico.
–¿No es bastante lógico tener problemas para comunicar políticas cuando se está en confrontación constante con los medios?
–Los grandes medios son actores políticos y eso es indudable. Hemos querido tener una relación de respeto mutuo. Pero eso es imposible cuando esos grupos quieren subordinar la política a sus intereses. Si la opción es arrodillarnos o confrontar, elegimos confrontar. Personalmente, no le rehúyo a ningún medio. Voy a todos los medios y doy el debate donde sea necesario.
Punto por punto
• Edad. 41 años.
• Hijos. Dos, de 11 y 16 años.
• Ocupación. Abogada, legisladora por el FpV.
• Estado civil. Divorciada.
• Una figura histórica. Juan Perón.
• Una esquina porteña. Callao y Corrientes.
• Un restaurante. Alé Alé.
• Un barrio. Almagro.
• Una película. El Padrino, de Francis Ford Coppola.
• Un libro. Guerra y paz, de León Tolstoi.
• Una frase. “Nunca odies a tus enemigos; nubla tu juicio.” Vito Corleone en El Padrino.
Fuente: Noticias Urbanas