El incendio del boliche Cromañón, ocurrido el 30 de diciembre de 2004, y que provocó las muertes de 194 personas y heridas a más de 1400, tuvo ayer una nueva respuesta judicial. La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal confirmó las penas a los miembros del grupo Callejeros, a Raúl Villarreal –mano derecha del gerenciador del local, el fallecido Omar Chabán–, y a Fabiana Fiszbin y Gustavo Torres, dos de los tres ex funcionarios porteños condenados. En el caso de Ana María Fernández, ex directora de Control Comunal, Casación le redujo la condena por considerar que durante su detención fue víctima de maltrato institucional debido a su orientación sexual (ver aparte). Según anticiparon a Tiempo sus defensores, los sentenciados recurrirán a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Todos podrían volver a prisión en el caso de que Casación rechace esos recursos.
Los jueces Juan Carlos Gemignani, Gustavo Hornos y Pedro David ya habían informado que el fallo se daría a conocer a través de medios electrónicos ayer al mediodía. De todas maneras, familiares de víctimas que forman parte de la querella se acercaron a los tribunales de Comodoro Py a recibir la noticia. A diferencia de las sentencias anteriores, esta vez no hubo tensión en el lugar porque no se cruzaron con los jóvenes de la agrupación “No nos cuenten Cromañón”, que apoyan a los miembros de la banda y a quienes los músicos les habían solicitado no asistir, ya que ningún imputado lo haría.
Lo que dice este nuevo fallo, unánime aunque con disidencias, es que todos los integrantes de Callejeros expusieron al público a un riesgo y que, ante esas condiciones, debieron haber suspendido el recital. Los jueces consideraron también que la conducta de Villarreal aumentó ese riesgo al haber habilitado el ingreso de “una cantidad de público abrumadoramente por encima de lo permitido y razonable” y eximido a algunos asistentes del cacheo tendiente a evitar el ingreso de pirotecnia. Además, el tribunal confirmó las responsabilidades de los tres ex funcionarios por no haber cumplido con sus obligaciones y haber permitido que el local funcionara sin las inspecciones pertinentes. Respecto del cohecho, Casación rechazó las objeciones de Villarreal (ver aparte) y, por mayoría –con disidencia del juez David–, les confirmó también la condena a los músicos por ese delito.
El 6 de octubre, a las 9:40, vencerá el plazo de diez días hábiles que tienen los condenados para interponer un recurso extraordinario para que la Corte revise las condenas, alegando un error procesal grosero o la violación de algún principio constitucional. Los abogados de los músicos ya anticiparon que harán uso de ese derecho. Luego habrá que esperar si la Sala IV admite o no el recurso, en el plazo que considere necesario. Si le da lugar, después será el máximo tribunal el que deba pronunciarse al respecto, sin fecha límite. De lo contrario, los acusados podrán presentarse ante la Corte con un recurso de queja y, mientras tanto, Casación puede disponer –como ya lo hizo antes– que los imputados esperen el proceso en prisión.
Esta parte del recorrido judicial comenzó en 2009, cuando el Tribunal Oral 24 condenó a Chabán, al ex subcomisario Carlos Díaz y al ex mánager de Callejeros Diego Argañaraz por estrago doloso y cohecho; a Villarreal, por cohecho; y a Fizsbin y a Fernández por incumplimiento de los deberes de funcionario público. En aquel fallo, Torres y los músicos resultaron absueltos.
Tras las apelaciones de rigor, la causa llegó al Tribunal de Casación. En 2012, la Sala III tomó dos decisiones que cambiaron el panorama: consideró que el delito no fue doloso sino culposo, es decir, sin intención, y condenó a todos los imputados, incluyendo a los que habían quedado afuera del fallo anterior, además de modificar el monto de las penas. Unos meses después, se ordenó el inmediato cumplimiento de las condenas y todos quedaron presos.
En agosto del año pasado, a pedido de las defensas, la Corte ordenó que otra sala de Casación dictara una nueva resolución porque entendió que, como habían sido juzgados por delitos diferentes, no se estaba cumpliendo el principio de “doble conforme”, una garantía de que haya dos respuestas judiciales a una misma sanción penal, o sea, a un mismo delito.
Dicha decisión derivó en que, tras casi dos años de prisión, los imputados pudieran esperar el nuevo fallo en libertad. Así ocurrió con Patricio Santos Fontanet, líder de la banda, que cumplía una pena de siete años; el saxofonista Juan Carbone, el bajista Christian Torrejón y los guitarristas Maximiliano Djerfy y Elio Delgado, todos con penas de cinco años; Villarreal, condenado a seis; y los ex funcionarios Fiszbin (cuatro años), Torres (tres años y nueve meses) y Fernández (tres años y medio). El escenógrafo Daniel Cardell ya gozaba de libertad condicional desde 2013 por haber cumplido su pena; Argañaraz quedó libre hace unos pocos días por haber cumplido dos tercios, ya que su recurso ante la Corte hizo un recorrido distinto; el baterista Eduardo Vásquez quedó preso, pero no por este hecho sino por el homicidio de su esposa, Wanda Taddei; y el subcomisario Díaz es, hasta hoy, el único que continúa preso por la tragedia de Cromañón. «

La defensa de Estela
Entre las voces que se manifiestan a favor de la inocencia de Callejeros, volvió a sobresalir ayer la de Estela de Carlotto.”Me pareció injusto el castigo, creo que hay un ensañamiento de los familiares de los jóvenes que murieron. No entiendo que el dolor sea furioso, de venganza, de expresiones rencorosas”, afirmó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo en una nota brindada al canal de noticias CN23, luego de que se conociera la confirmación de las condenas. “Voy a seguir apoyándolos siempre en todo lo que pueda porque no son culpables en lo absoluto. Creo que les hace mucha falta recibir cariño ante lo que ha pasado”, agregó.

Las penas revisadas
Ana María Fernández
La Sala IV sólo le redujo la condena a la ex funcionaria del área de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, de tres años y seis meses a dos años y diez meses de prisión.
La revisión del fallo mantuvo las penas impuestas en el resto de los casos.
Patricio Santos Fontanet
Siete años de prisión.
Raúl Villarreal. Seis años.
Eduardo Vásquez. Seis años, aunque fue condenado a prisión perpetua por el crimen de su esposa, Wanda Taddei.
Los músicos Juan Alberto Carbone, Cristian Torrejón, Maximiliano Djerfy y Elio Delgado. Cinco años.
Fabiana Fiszbin. Cuatro años.
Gustavo Torres. Tres años y medio.

Villarreal, sin impugnación
“Lamentablemente, se está condenando a un simple trabajador, que no establecía el número de concurrentes ni estuvo a cargo del control”, aseguró Albino Joe Stefanolo, el abogado de Raúl Villarreal, cuya impugnación fue rechazada ayer en el fallo de la Sala IV de Casación. El defensor sostuvo que “da estupor el fallo porque hace oídos sordos a cientos de testigos que dieron fe de su inocencia en el juicio”, y adelantó a este diario: “Seguiremos la vía recursiva para lograr que su inocencia sea reconocida en un fallo definitivo, que lo reconozca como un trabajador ajeno a toda responsabilidad en la tragedia de Cromañón.”

Rebajaron la pena a Ana Fernández
“La sensación es ambigua: me rebajan la pena reconociendo que actuaron mal pero la justicia tuvo una nueva oportunidad y la desperdició”, le dijo a Tiempo Ana María Fernández, ex directora adjunta de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad. Antes de que los imputados quedaran en libertad, ella cumplía prisión domiciliaria por ser madre de un hijo menor de cinco años. Obtuvo ese beneficio en la Corte, pero primero estuvo detenida en el penal de Ezeiza porque la justicia argumentaba que el chico tenía “otra mamá”, en referencia a la esposa de Fernández, quien no lo amamantaba. En el nuevo fallo, la Sala IV dispuso una reducción proporcional de su condena por el “maltrato institucional” que sufrió al haber sido discriminada por su orientación sexual. Para Fernández, se trató de “violencia”, y protestó porque este fallo la sigue considerando responsable de la tragedia. La ex funcionaria anunció que recurrirá al máximo tribunal y agregó: “Voy a llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Alguien tiene que fallar acorde a derecho y no a las necesidades del poder.”

Abogados, satisfechos e indignados
“Estamos en total desacuerdo con el fallo”, se indignó ante Tiempo Nicolás D´Albora, del equipo de abogados de los músicos Patricio Fontanet, Cristian Torrejón y Daniel Cardell. “El juez Pedro David votó en disidencia respecto del cohecho, o sea que para él no está probado. Y hay un montón de esos agravios que entendemos que no fueron tratados”, dijo, anticipando el recurso extraordinario que presentará para que la Corte Suprema revise el fallo. Adelantó, además que “mientras haya una posibilidad legal de recurrir a un organismo, nacional o internacional, la decisión es no dejar pasar la oportunidad de seguir con esta discusión”.
Por su parte, el abogado querellante Patricio Poplavsky se mostró satisfecho por la resolución, a pesar de que tanto él como sus representados consideran que el delito que debería imputarse es doloso y no culposo. Sobre la reducción a la pena de Fernández, no protestó “porque la responsabilidad penal se mantiene” y advirtió que “si Casación rechaza el nuevo recurso de las defensas, los antecedentes de la causa indican que todos esperarán en prisión”.

Fuente: Tiempo Argentino