Más de 400 autos son acarreados diariamente por infracciones

Los problemas para dejar el auto son una constante en la Ciudad y, como consecuencia, las infracciones aumentan en este sentido. De acuerdo con las cifras de la Secretaría de Transporte porteña, las grúas acarrearon 13.000 vechículos por mes durante 2015, a razón de 430 por día. Y la semana pasada uno de esos remolques terminó mal. El dueño de una camioneta fue a buscarla a la playa que la empresa SEC opera en Constitución y discutió a los gritos con los empleados. Cuando quiso llevarse el vehículo sin pagar, le bajaron la barrera y él estalló: estuvo casi un día detenido por destrozar los vidrios de una cabina.

Las empresas a cargo del servicio de acarreo, BRD-SEC y Dakota-STO, tienen los contratos vencidos desde 2001. Y el proceso licitatorio para volver a concesionar ese servicio y el de estacionamiento medido está frenado por la Justicia (ver aparte). Pero todavía con sus contratos vencidos, BRD y STO cada vez levantan más autos. En el 2013, el promedio era de 9.000 por mes, un 44 por ciento menos que en la actualidad.

Según publicó Clarín, por cada vehículo que se llevan las empresas, reciben $580 de acarreo, es decir que entre ambas recaudan unos $ 9.860 cada hora. Eso se suma a los $3 que cobran por hora en los 4.000 puestos de estacionamiento medido que hay en la Ciudad. Aun así, cada empresa paga un canon de apenas $30.000 por mes.

Los vecinos se quejan por el maltrato a los autos durante el acarreo y porque aseguran que las grúas salen de cacería. Y cada tanto, alguno estalla. Eso fue lo que ocurrió el jueves pasado. Según Transporte, que tiene bajo su cargo a los agentes de tránsito, fue acarreado un vehículo de la avenida San Juan al 1100, sobre el cordón izquierdo, que además estaba pintado de amarillo.

El vehículo, una camioneta Kangoo blanca, fue trasladado a la playa de la empresa SEC, en Juan de Garay y Bernardo Irigoyen. Cerca de las 18.30, el dueño se presentó a retirarla y, según el Gobierno porteño, se negó a mostrar la documentación y a pagar los $ 580 del acarreo. Algunos testigos señalaron que, incluso, intentó llevarse el vehículo. Pero cuando los agentes de tránsito lo impidieron, los insultó a los gritos, tomó un fierro y rompió los vidrios de una garita de seguridad y el de una ventanilla de cobro.

Finalmente, intervinieron los efectivos de la Policía Metropolitana, que se lo llevaron detenido e incluso tuvieron que dar aviso al SAME, porque el hombre estaba muy alterado. Por otra parte, además del costo del acarreo, el agresor, un electricista de 43 años cuyo nombre no trascendió, deberá pagar $650 de multa por mal estacionamiento.

El episodio recuerda a la reacción de “Bombita”, el personaje de Ricardo Darín en el filme Relatos Salvajes. De igual modo se sienten muchas de las personas que se encuentran ante la misma situación.

En 2009, la entonces jueza Rosa Parrilli tuvo una violenta reacción en el playón que funcionaba debajo del Obelisco, luego de que una grúa de SEC se llevara su auto de Rodríguez Peña al 400.

Otro recordado hecho fue protagonizado por Oscar Feito, el ex secretario de medios durante la gestión de Jorge Telerman. Pero en ese caso, el agredido fue él. Una grúa se llevó su auto de Cerviño y Salguero. Como Feito no tenía dinero para pagar el acarreo, fue a la playa ubicada junto a la Facultad de Derecho sólo para sacar algunas pertenencias del vehículo. Cuando se iba, cuatro empleados lo increparon por haber ingresado al lugar sin autorización y le pegaron.

Planean llevar las grúas a los barrios

La Justicia mantiene suspendida la licitación para volver a concesionar el estacionamiento medido y extender las grúas a la mitad de la Ciudad. Una vez que se implemente el sistema, habrá que pagar para estacionar en el 45% de las 24.437 cuadras porteñas, incluyendo las de los barrios, donde se sumarán 2.000 puestos de estacionamiento medido. Pero todo está parado por un conflicto surgido de la licitación para determinar qué tipo de tickeadoras se usarán y con qué software. Ese servicio ya fue adjudicado a una empresa, pero la competidora presentó un amparo y frenó todo.

Paso a paso

El acarreo: la empresa SEC realiza los remolques en la zona sur y STO, en la zona norte. El límite de cada empresa está dado por la calle Viamonte. Una vez que retiran un auto, dejan un aviso para su propietario.

El retiro: para liberar el auto, su dueño debe pagar una sanción de $580. Las playas se encuentra en Constitución y en Recoleta. El horario es durante las 24 horas todos los días del año.

La multa: es de $650 pero no se debe pagar en el predio, sino que es enviada por el GCBA al domicilio del titular. Al retirar el auto, la persona es notificada de la existencia de la multa y se le entrega una copia.

El ránking de infracciones en la Ciudad

Por segundo año. Mal estacionamiento, la falta más común
Por segundo año consecutivo, más de la mitad de las multas labradas en la Capital el año pasado fueron por mal estacionamiento (1,1 millón), unas 70.000 más que en 2014. Resulta que ante el crecimiento del parque automotor, muchos conductores terminan estacionando en ochavas, rampas o en veredas prohibidas.

La segunda falta.El exceso de velocidad, un riesgo al volante
Los agentes de tránsito de la Ciudad realizaron 320.848 actas de infracción el año pasado, un 20% menos comparado con el 2014. Según el cuadro tarifario, circular con hasta 20 kilómetros por hora de exceso en calles o avenidas cuesta $975, mientras que en autopistas, $1.625. En los casos más graves puede llegar a costar $26.000.

Tercer lugar. Cruzar el semáforo en rojo tiene una multa de $9.750
Más abajo entre las faltas más comunes aparece cruzar un semáforo en rojo, otra infracción muy habitual pero no tan sancionada. El año pasado se realizaron 68.500 actas, un 25 por ciento menos que en 2014. Los infractores deben pagar una multa de 9.750 pesos, según la última actualización de las Unidades Fijas.

Cuarto puesto.El uso del celular, una distracción peligrosa
El uso del celular al manejar registró alrededor de 30.000 infracciones sancionadas por agentes en la calle. De todas formas, en este caso la sensación es que el uso del teléfono está mucho más extendido, pero varias veces la cantidad de multas depende de los controles que efectivamente se realizan en la vía pública.

Fuente: La Razón

*

*

Top