La dirigente de la Tupac Amaru y diputada del Parlasur, Milagro Sala, habló ayer desde la carcel de mujeres de Alto Comedero, en Jujuy, donde se encuentra privada de su libertad desde el 20 de enero, acusada por la justicia provincial y el goberndor radical Gerardo Morales de ” instigación a cometer delitos y tumultos”, un eufemismo para referirse al acampe que la organización social llevaba a cabo frente a la gobernación en reclamo de una audiencia con el mandatario provincial.
Lo hizo a través de una carta enviada a los trabajadores del diario Tiempo Argentino y de Radio América en la que, además de solidarizarse con el reclamo por el pago de salarios y la continuidad de la fuente de trabajo, aludió a su situación personal a la que definió sin tapujos como un “secuestro”.
“Hoy, me toca estar privada ilegalmente de mi libertad, estoy secuestrada por el poder judicial de Jujuy que responde a las órdenes de Gerardo Morales”, escribió Sala, luego de inscribir su detención en una represalia por el apoyo que les brindó a los organismos de Derechos Humanos para investigar la complicidad civil con la dictadura en Jujuy y “generar conciencia para que los que no tenían un proyecto de futuro hayan podido levantar la cabeza”.
El mensaje dirigido a este diario se conoció en momentos en que se suman las voces a favor de la libertad a la dirigente social y diputada regional. Días atrás, la Procuraduría contra la Violencia Institucional determinó que Milagro Sala está privada ilegalmente de su libertad y que “se impone la urgente e inmediata resolución que ordene su libertad”, e inclusive opinó que “corresponde iniciar acciones penales contra los jueces Raúl Gutiérrez, Gastón Mercau y la fiscal Liliana Fernández de Montiel”.
A continuación, el mensaje completo dirigido a los trabajadores:
A los compañeros de Tiempo Argentino y Radio América:
En menos de una semana vuelvo a escribir un mensaje para compañeros que fueron despedidos o que están luchando por su trabajo. Hoy por hoy, casi todos los argentinos estamos viviendo tiempos duros.
En el caso de ustedes están enfrentando una lucha difícil. En primer lugar, en defensa de sus fuentes de trabajo y de los derechos que tienen como trabajadores. En segundo lugar, por la dura situación que se vive hoy con los medios en nuestro país. Los grandes grupos concentrados, manchados con sangre, se convirtieron prácticamente en la única voz que desde sus pantallas y sus páginas nos juzgan y condenan sin más prueba que el odio que tienen. Lo hacen con un claro objetivo: callarnos, para consolidar así sus intereses económicos. Por eso es tan importante que medios como Tiempo Argentino y Radio America sigan funcionando para darle lugar a los que pensamos diferente.
La historia nos demostró a todos los argentinos que con fuerza, con convicción y compromiso en la lucha, hasta las batallas más difíciles pueden ganarse. Lo lograron las madres, las abuelas y tantos organismos de derechos humanos que cuando incluso parecía imposible dieron pelea y con los años consiguieron que la verdad se conozca y que muchos genocidas paguen sus crímenes en la cárcel.
Hoy, me toca estar privada ilegalmente de mi libertad, estoy secuestrada por el poder judicial de Jujuy que responde a las órdenes de Gerardo Morales. Quieren hacerme pagar mi apoyo a los organismos para que el principal responsable civil de la dictadura en Jujuy no quede impune. Me quieren hacer pagar por haber generado conciencia para que los que no tenían un proyecto de futuro hayan podido levantar la cabeza. Y desde este penal de mujeres, les digo, con la cabeza más alta que nunca, que la única lucha que se pierde es la que se abandona. A seguir con fuerza compañeros. Porque no podemos dar ni un paso atrás, ni para tomar impulso como dicen los compañeros cubanos, en los derechos que hemos consolidado en estos últimos 12 años y porque no podemos permitir que continúen avasallando nuestros derechos. Y la lucha debe ser con fortaleza y mansedumbre como dice el argentino más importante del mundo (N. de la R.: el Papa Francisco). Por favor, no se presten a provocaciones que las hay y habrá de todo tipo. «
Con cariño,
Milagro Sala
A los trabajadores
“La historia nos demostró a todos los argentinos que con fuerza, con convicción y compromiso en la lucha, hasta las batallas más difíciles pueden ganarse”.
“Desde este penal de mujeres, les digo, con la cabeza más alta que nunca, que la única lucha que se pierde es la que se abandona. A seguir con fuerza compañeros”.
Fuente: Tiempo Argentino