El jefe de Estado explicó cuál era su participación en la empresa offshore que había montado su papá para realizar una inversión en Brasil. Dijo que no recibió dividendos y por eso estaba exento de declararla
Las filtraciones de documentos secretos del estudio de abogados Mossack Fonseca generó un escándalo internacional que salpicó a varios argentinos, entre ellos el presidente Mauricio Macri. El jefe de Estado eligió el diario cordobés La Voz del Interior para hacer su descargo.
La entrevista completa:
–La difusión de los Panamá Papers, donde figura su nombre, conmovió al país y tuvo repercusión internacional…
–Hay algo positivo en el mundo en que vivimos. Que cada vez se avanza hacia una mayor transparencia, cada vez hay más conocimiento público de informaciones que antes eran de difícil acceso. En el caso particular de lo que a mí me compete, es una operación legal, hecha por otra persona, que constituyó una sociedad offshore para invertir en Brasil, lo que luego no se hizo y donde yo estaba puesto como director. La empresa es de mi padre. Se hizo en 1998, y dejó de operar en 2008 porque no hizo la inversión, con lo cual está todo perfecto. No hay nada extraño en esa operación.
–¿No cree que va a perder credibilidad para hablar de los temas de corrupción?
–Nada. Ninguna. Este es un hecho totalmente claro y transparente, mi padre no hizo ninguna cosa incorrecta. Declaró en la DGI que iba a formar una sociedad en Panamá para invertir en Brasil. Finalmente, después no lo pudo hacer. Me estuve interiorizando, porque la verdad es que no tenía ni idea de qué se trataba esa sociedad. Y era para cuando en ese momento quería extender Pago Fácil a Brasil, pero finalmente después no pudo. Ni siquiera tuvo cuenta corriente la sociedad, con lo cual fíjense lo poco que llegó a operar. Así que, ¿qué hay de raro en eso? Hay otros que usan paraísos fiscales para esconder dinero que ganan en forma mal habida. Son dos cosas distintas. Acá el problema no es el instrumento, sino para qué se lo utiliza.
–¿No recibió dividendos ni cobró honorarios por esa participación en esa sociedad?
–Dividendos, no. Porque yo nunca fui accionista. Y honorarios, tal vez le voy a pedir que le reclame a mi padre que alguna vez me hubiese pagado honorarios, en aquella época, por ponerme en directorios. No, no, no. No cobré nada.
–¿Está tranquilo?
–¿Por qué no debería estarlo?
–Porque es un tema que tiene trascendencia internacional. Se está hablando de un mani pulite argentino. Esto lo puede complicar.
–Me complicaría si yo hubiese hecho algo incorrecto, pero no hice nada incorrecto. Estoy muy tranquilo, claramente. Yo debo ser uno de los pocos políticos que desde que arrancó en política declaró su situación patrimonial, tengo las declaraciones juradas desde que empecé como jefe de Gobierno, las he vuelto a presentar como presidente.
Ahora vamos a hacer un fideicomiso ciego por primera vez en la historia de la Argentina, para que alguien se ocupe de mis cuestiones personales hasta que yo termine mi responsabilidad pública, con lo cual, digamos, que claramente estoy marcando un camino que nunca se había recorrido en el país.
–¿Por qué no lo puso en sus declaraciones juradas?
–Porque no era accionista. Yo declaré en mi posición todas las cosas de las que soy dueño. No puedo declarar cosas que no pertenecen a mi patrimonio. Así que no tengo nada que declarar. Yo declaro las cosas que son mías. Yo estoy conforme a la ley, como siempre hice.
–Está instalada la idea de que las sociedades offshore son poco transparentes.
–Lamentablemente, es así por la poca credibilidad que ha tenido la dirigencia durante muchos años. La desconfianza y los prejuicios avanzaron, pero hay instrumentos societarios en todas partes del mundo que tienen distintos tipos de ventajas. Son instrumentos jurídicos societarios contables que se utilizan para invertir. Uno los puede emplear desde el punto de vista legal, porque hay trazabilidad de la plata de dónde la saco. A uno le fue bien, ganó plata y quiere invertir en otro lugar, bueno, uso el instrumento de otro país. Y otra cosa distinta es el que tiene plata mal habida.
–En los casos de corrupción que se investigan en Argentina, está pidiendo celeridad a la Justicia.
–Creo que es coherente con lo que expreso desde hace 10 años. La Justicia que no actúa en tiempo y forma no es justicia. No podemos estar enterándonos de que (Víctor) Alderete cometió alguna irregularidad en el Pami casi 20 años después. Yo les pido a todos los jueces que actúen con celeridad y con independencia. Desde el Ejecutivo van a contar con toda la colaboración, toda la información que ellos necesiten. No hay excusas, lo que necesitamos es que ellos actúen. Y espero que si alguna vez algún funcionario de mi Gobierno comete alguna irregularidad, se lo juzgue también con esa misma celeridad. Seré el primero en arrimar toda la información que haga falta.
–¿Qué opina de la detención de Ricardo Jaime?
–Predico la importancia de la independencia de los poderes; entonces, a veces, veo que aquellos que creemos en eso después pedimos un presidente omnipresente que se ocupe de hasta meter preso a la gente. Y eso no es responsabilidad del jefe del Estado, que sólo tiene que colaborar para garantizar que la Justicia actúe con libertad. No hacer cadenas nacionales para pelearse con los jueces y para agredir a los jueces sí quieren investigar. Que investiguen todos, acá estamos a disposición ante cualquier duda. Es nuestra obligación, lo tenemos que hacer como parte de nuestra responsabilidad. Lo mismo digo con lo de Jaime. Hacer expresiones puntuales no me corresponde. Digo que no se puede tardar tantos años en develar si se importaron a precios viles trenes o si se compraron cosas con sobreprecios.
Fuente: Infobae