“Enganchar” a nuestra pareja en una situación de coqueteo con otra persona es un fantasma viejo presente en casi todos los vínculos amorosos. Pero pasan los años y sigue sin quedar claro de qué lado queda el típico histeriqueo y cuáles son los limites con una infidelidad.
Hablemos del histeriqueo en el mundo virtual: chatear con alguien que no es tu pareja intentando conquistarlo, ¿es traición? ¿Es infidelidad intercambiar mensajes seductores con otra persona? ¿Es lo mismo engañar físicamente a una persona que virtualmente?
Para entender un poco más sobre el tema hablamos con Valeria Schapira, experta en relaciones para el sito Match.com, quien nos ayudó a responder algunos de los interrogantes.
Qué piensan los argentinos
El sitio de citas Match.com elaboró una encuesta en la que los argentinos cuentan cómo se sienten ante los “engaños virtuales” y los números te van a sorprender: el 48% de las personas encuestadas cree que las redes sociales pueden arruinar una pareja.
Lo cierto es que enfrentarse a un engaño no es igual para todos. En este caso, la experta en parejas Valeria Schapira da las siguientes recomendaciones:
1. Hablen el mismo idioma
“Cuando las cosas están claras entre adultos y el juego honesto está planteado de antemano, cada quien tiene la facultad de decidir si quedarse o retirarse”. Cada pareja es un mundo y vos elegís cómo querés que sea la tuya y si te bancás un histeriqueo online o si un mensaje detona un infierno.
2. Respeten los acuerdos
La mayoría de los que descubre un “engaño virtual” dice estar muy lastimado, tanto como si hubiera descubierto a su pareja teniendo sexo con un tercero. Según la experta es importante que cada pareja establezca sus propias reglas de convivencia y las respete. Allí donde se cruza el umbral del respeto, comienza la desconfianza y es imposible construir los vínculos.
3. Dialoguen sobre lo que pasa
¿Pensaste por qué puede darse esta situación? Según Schapira, los histeriqueos online se dan producto del aburrimiento, del hartazgo de la rutina o con la sola finalidad de probar que el poder de seducción sigue vigente. Con esta conducta, es probable que se genere un daño irreparable en la relación y se lastime a aquella persona en quien generamos falsas expectativas del otro lado de la pantalla. ¡Hablalo! Una charla sincera puede marcar el renacimiento o el camino al final de la pareja. Mejor dialogar y ver qué pasa.
4. Evalúen cómo está la pareja
Cómo está la relación es la primera pregunta. Algo que en apariencia es intrascendente -como un chat entre dos personas sin encuentro físico posterior- puede hablar de un tema de fondo mucho más complejo. Evalúen qué es lo que no está funcionando entre ustedes para no poner en riesgo la pareja por un jugueteo virtual. “Cuando hay una buena construcción de base, no hay redes sociales que sean capaces de desunir lo que el buen amor ha unido”.
A algunos les parecerá muy grave y no perdonarán una situación de histeriqueo virtual. Otros podrán entenderlo e incluso están los que lo ven como una diversión. Creemos que no hay verdades sobre este tema sino que está en cada pareja crear las reglas propias.
Y vos, ¿perdonarías un histeriqueo online?
Fuente: IMujer