Prohibieron a Trump recibir aportes de campaña por estar “flojito de papeles”

La fundación de Donald Trump, el candidato a la presidencia de Estados Unidos por el Partido Republicano, no podrá recibir más contribuciones por el momento, anunció el fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman.

El Estado envió el viernes una carta al candidato republicano apuntando que la Donald J. Trump Foundation no está registrada como organización benéfica y por lo tanto viola la ley.

La fundación debe presentar además cada año su balance anual. Si Trump no presenta dentro de las próximas dos semanas los recibos de las donaciones, las actividades de la fundación serán calificadas como “fraude persistente”, agrega el comunicado de la Fiscalía.

Hace dos semanas, el Estado de Nueva York abrió una investigación debido a la sospecha de que la Donald J. Trump Foundation infringió la regulación de organizaciones benéficas.

La fundación del político republicano y multimillonario había sido criticada recientemente por haber donado 25.000 dólares (unos 22.300 euros) en 2013 a la campaña de la fiscal general de Florida, Pam Bondi.

En esos momentos Bondi debía decidir si Florida se sumaba a las investigaciones de otros estados federales sobre un presunto fraude de la universidad Trump.

Finalmente Bondi decidió no participar de la investigación. El martes, los 16 miembros demócratas del Comité de Justicia en la Cámara de Representantes pidieron en una carta a la secretaria de Justicia Loretta Lynch que investigue el caso por presunto soborno.

El diario “The Washington Post” informó además que Trump al parecer no donó tanto dinero propio para fines benéficos como ha venido asegurando. Además, financió gastos personales con el dinero de la fundación. Entre otros pagó 20.000 dólares por un retrato suyo de 1,8 metros.

• Empresa de Trump alquiló oficinas a banco iraní sancionado por la Justicia

La compañía inmobiliaria dirigida por el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, tuvo como inquilino un banco iraní sujeto a sanciones del Departamento del Tesoro del país norteamericano por supuesto apoyo al terrorismo y al programa nuclear de Irán.

La revelación es fruto del trabajo de investigación del Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ), con sede en Washington, publicado hoy y que muestra que el banco iraní Melli fue inquilino de Trump Organization desde 1998 hasta 2003.

La información se conoció un día después de que el diario The New York Times afirmara que Trump podría haber evadido millones de dólares en impuestos desde 1995, en medio de la polémica por su negativa a hacer pública su declaración impositiva, algo que rompe con una larga tradición para los candidatos presidenciales.

En 1998, el Banco Melli, uno de los mayores bancos iraníes, alquiló a la empresa de Trump oficinas en el edificio de General Motors en la Quinta Avenida de Nueva York, según el ICIJ, que se hizo famoso este año con los “Panamá Paperes”, que destaparon activos opacos de personalidades de todo el mundo.

La entidad financiera fue sometida a las sanciones del Departamento del Tesoro en 1999, pese a lo cual Trump Organization siguió teniéndolo como cliente hasta 2003, cuatro años después de la designación.

Según el ICIJ, el banco alquiló durante ese tiempo un espacio de oficinas de cerca de 750 metros cuadrados en la planta 44 del edificio a un precio que podría rondan el medio millón de dólares anuales, informó la agencia de noticias EFE.

El gobierno estadounidense considera que el banco iraní fue utilizado para obtener materiales para el programa nuclear de la República Islámica, así como para mover dinero de manera secreta entre 2002 y 2006 a una unidad de la Guardia Revolucionaria Iraní.

Pese a las sanciones, puede que el pago del alquiler del Banco Melli en Nueva York estuviera exento de esa pena, lo que hubiera hecho legalmente muy difícil expulsar al inquilino del edificio.

El Departamento del Tesoro no hace públicas esas exenciones y tanto la entidad financiera iraní como la campaña de Trump se han negado a dar detalles sobre los motivos por lo que el alquiler se mantuvo pese a las sanciones.

Los negocios entre el banco iraní y la empresa inmobiliaria de Trump se conocen en plena recta final de la campaña electoral en Estados Unidos, donde se medirá a su rival demócrata, Hillary Clinton, en los comicios del próximo 8 de noviembre.

El magnate ha criticado al régimen de Teherán y el acuerdo internacional que lideró el gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, para limitar el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones.

Fuente: Ámbito Financiero

*

*

Top