Nuestro hogar es ese espacio que habitamos, donde podemos sentirnos únicos y a gusto con nosotros mismos y en compañía de aquellos con quienes compartimos nuestros días. Un lugar al que le hemos puesto nuestro amor, atención y cuidado. Una zona de bienestar, relajación y comodidad, un sitio para sentirnos seguros, renovar energías y conectarnos con lo propio. Estar en casa nos permite olvidarnos del afuera y ser nosotros mismos, con la ventaja de poder disfrutar de lo que realmente nos gusta: leer un libro, pasar tiempo con nuestras mascotas, charlar con amigos, cuidar nuestras plantas, disfrutar del sol, caminar descalzos o escuchar música.
1. Sacarte los zapatos y caminar descalza por toda la casa. El placer de bajarnos de los tacos altos o de esos calzados poco cómodos apenas cerramos la puerta es tocar el cielo con las manos, nos brinda una enorme sensación de alivio y bienestar. Además, despojarnos del calzado nos hace dejar fuera la energía del exterior. Más aún si tenemos un jardín y podemos estar en contacto directo con la naturaleza, otro instante que nos generará una enorme relajación y sensación de libertad.
2. Ponerte la remera rota, vieja o ropa cómoda. Toda la semana nos producimos, peinamos y maquillamos, por eso, cuando estamos en casa nos liberamos y nos damos el gusto de ponernos aquella remera de algodón vieja, rota, o ese pantalón que apenas sobrevive pero ¡qué prácticos y cómodos son!
3. El placer de tomar unos ricos mates. Un ritual ideal para un momento de relax en casa luego de un agitado día, o para la mañana, solas o con la compañía de la familia o amigos. Es el complemento ideal para esos minutos de tranquilidad.
4. Sumergirnos en la bañera o darnos un buen baño relajante en la ducha. Pocas cosas deben ser más gratificantes que disfrutar de un placentero baño para olvidarnos del estrés, las tensiones y las preocupaciones del día. Podemos crear un ambiente con música relajante y velas. Una excelente manera de cortar y separarnos del “afuera”.
5. Hacer ejercicio. Nada como estar en la comodidad de la casa, tomarnos un momento para hacer Yoga, meditar o seguir una rutina de entrenamiento. Nos podemos vestir con ropa cómoda, utilizar nuestra propia música para entrenar y acomodar la habitación como más nos guste.
6. No hacer nada. Vivimos hiperconectadas, trabajando, corriendo y cumpliendo con responsabilidades y pendientes, pero hay momentos en los que tenemos la posibilidad de decidir por nuestro tiempo libre y no hacer absolutamente nada. Es una excelente decisión para disfrutar completamente el instante presente.
7. Cuidar nuestras plantas. Disfrutar de nuestra casa es también poder dedicarle tiempo a estar conectados con la naturaleza, cuidar nuestras plantas, que nos brindan una sensación de armonía y buenas energías en los espacios. Cambiarles la tierra, limpiarles las hojas secas y regarlas siempre será una buena elección.
8. Disfrutar de una buena y elaborada comida. Los horarios laborales y la falta de tiempo nos llevan a comer fuera de casa, a comprar el almuerzo rápido y a las apuradas; por eso, elaborar una rica comida casera, acompañada con un buen vino, solas o en compañía de la familia o amigos, no tiene precio.
9. Dormir una siesta. Es muy beneficioso para el organismo: nos relaja, despeja, nos permite renovar energías y nos hace sentir muy bien.
10. Leer un libro. Recostadas, en el sillón, en la cama, en un rinconcito tranquilo, tapadas con una mantita y acompañadas de un buen libro, de esos que nos atrapan y queremos terminar a toda costa. Es, sin dudas, una idea perfecta para poder desconectar del mundo que nos rodea.
11. Mirar películas o nuestras series preferidas. Reírnos a carcajadas sin que nadie se moleste por el ruido, o llorar sin vergüenza a raíz de lo que estamos viendo -incluso acompañar el momento con una pizza, cerveza o helado- es un placer de fin de semana.
12. Jugar con nuestra mascota. Pasar tiempo con nuestros compañeros de hogar es altamente gratificante. Nos hacen reír, nos demuestran su cariño incondicional, nos regalan mimos, nos festejan… Nos hacen sentir mucho mejor de lo que imaginamos.
13. Interminables charlas con amigos. WhatsApp, mensajes de texto, mails, redes sociales, pero… ¿Qué mejor que tener un tiempo para poder conversar con nuestros amigos en la calidez de nuestra casa? Una buena forma de desconectar de los problemas cotidianos y una manera más de llevar una vida sociable y saludable. Pasar tiempo con nuestras amistades es un pequeño placer de la vida diaria.
14. Escuchar a todo volumen tu canción favorita una y otra vez. Subir el volumen y escuchar esas canciones que amamos, que nos hacen bailar o emocionar, y las que siempre queremos disfrutar. La música estimula los sentidos, nos mejora el estado de ánimo, favorece nuestra creatividad y nuestras emociones. Una sensación absoluta de liberación y bienestar que podemos experimentar en nuestro nido.
15. Tomarnos un tiempo para navegar en Internet y las redes sociales. Ya sea para hacer trámites, leer sobre temas que siempre nos interesaron (y por falta de tiempo no pudimos ver), visitar redes sociales, subir fotos, ver fotos o chatear con amigos. Es otro de los entretenimientos para nuestro tiempo de ocio.
Y vos, ¿cómo disfrutás del placer de estar en casa?