Es desde que se inició la encuesta. Las perspectivas de contratación tuvieron una baja de 6 puntos porcentuales en comparación con el trimestre anterior y 12 puntos porcentuales en comparación con la cifra de hace un año. Los datos surgen del relevamiento de la consultora Manpower.
El arranque de 2019 no traerá buenas noticias en materia de empleo: el primer trimestre del próximo año muestra señales preocupantes al menos en lo que respecta a la creación de nuevos puestos de trabajo, según lo reveló el tradicional informe sobre Expectativa Neta de Empleo (ENE) en Argentina que elabora la consultora Manpower. El trabajo arrojó una perspectiva para el primer trimestre de -4 en la comparación interanual con igual período del año pasado ajustada por estacionalidad. Se trata del peor registro en 12 años, desde que se lleva a cabo el relevamiento. La cifra es aún peor que lo ocurrido durante la crisis financiera de 2009, y por supuesto el índice más bajo, y por primera vez negativo, desde que Mauricio Macri es presidente.
En diálogo con Ámbito Financiero, Fernando Podestá, director nacional de Operaciones de Manpower, sostuvo que “es el número más bajo que hemos tenido en toda la serie y consolida la baja que tuvimos durante todo 2018”.
“Los empleadores argentinos informan planes de contratación laboral pesimistas para el primer trimestre de 2019. Un 8% de los empleadores prevé aumentar su dotación, un 11% anticipa una merma y un 77% no anticipa cambios en su plantilla, lo que arroja una ENE de -3%. Al ajustar los datos para tener en cuenta la variación estacional, la Expectativa de Empleo se ubica en -4%. Las perspectivas de contratación son las más débiles que se hayan informado desde que se inició la Encuesta hace 12 años, con una baja de 6 puntos porcentuales en comparación con el trimestre anterior y 12 puntos porcentuales en comparación con la cifra de hace un año”, asegura el sondeo.
Las peores perspectivas se muestran en las micro (menos de 10 empleados) y pequeñas (entre 10 y 49) empresas, con ENE de -7 y -4, respectivamente. Las medianas (entre 50 y 249) reflejan un ENE de 0 y las grandes (250 o más) de -1. En todos los casos también reflejan las peores expectativas en más de una década.
Respecto a las posibilidades de recuperación, Podestá opinó: “Como esto es expectativa, hay que ver luego cómo se traduce en la realidad, aunque lamentablemente esto viene ocurriendo. Y hay que pensar que las empresas, por la baja del consumo, están sobrestockeadas y demandan menos personal. Más allá de que se dice que la economía empezaría a repuntar a partir del segundo trimestre, las empresas no se están comprometiendo. Podría llegar a ser un piso en la medida en que nunca hubo un registro tan bajo, y porque el año que viene hay elecciones y el Gobierno debería traccionar para que la economía se mueva un poco más”. Asimismo, agregó que no se están registrando despidos masivos, pero sí hay suspensiones y reducción de jornadas. “Las empresas están ajustando levemente dentro de lo que pueden. Todavía hay una contención para evitar los despidos, porque se cree que la economía va a reaccionar”, añadió.
Sectores
En la medición por sectores queda reflejada la retracción en la construcción, que venía siendo el principal motor de actividad y empleo. El ajuste en la obra pública y en la privada, producto de la disparada de costos por la fuerte devaluación, dejó un ENE de -12 y de -11 por estacionalidad. “Así como la construcción traccionó hacia arriba, hoy lo hace hacia abajo. Si mejora, empuja también finanzas, pero ahora lo arrastra”, explicó el ejecutivo de Manpower.
La contratación también es débil en Transporte y Servicios Públicos, Manufacturas, en Comercio Mayorista y Minorista, Administración Pública y Educación, Servicios, y en Minería. Finanzas, Seguros y Bienes Raíces se mantiene estable, mientras que sólo se ven números positivos, aunque bajos, en Agricultura y Pesca. En varios casos las expectativas son las peores en años.
Regiones
“Los empleadores de cuatro de las seis regiones prevén reducir sus dotaciones durante el trimestre que se avecina. La ENE más débil se registra en el NOA (Noroeste argentino) con un -9%. Otras regiones en las que los empleadores anticipan un nivel de contratación laboral deprimido son el NEA (Noreste argentino) con una expectativa de -7%, la región pampeana con -5% y el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) con -4%”, indica el informe. En cambio, los empleadores de la Patagonia anticipan un leve crecimiento de sus nóminas con una expectativa de +5% y los de Cuyo esperan una mejora de +1%.
El AMBA y el NOA presentan los peores registros desde que se inició la medición de Manpower. En contraposición, los guarismos son más alentadores en la Patagonia y Cuyo. Esto se explica por dos razones: en primer lugar, por el aumento de la producción de hidrocarburos, uno de los pocos sectores que sigue traccionando empleo. El otro es del sector vitivinícola, que mejoró sus ingresos por exportaciones gracias al salto del dólar.
En la comparación con la región y el resto del mundo, de las más de 40 naciones medidas, la Argentina es la única que muestra datos negativos con -4. En la otra punta están Japón (+27%), Taiwán (+21%) y EE.UU. (+20%). En el continente también está atrás: México (+14%), Colombia y Guatemala (+10%), Brasil (+8%), y Perú (+7%).
Fuente: Ámbito Financiero