Gran Bretaña y la Unión Europa alcanzaron un acuerdo comercial a una semana de concretarse el Brexit, que comenzará a regir el 1 de enero, y dejaron afuera a las Islas Malvinas, por lo que todo lo producido en este territorio insular comenzará a pagar aranceles para ingresar al bloque regional.
Las Malvinas son parte de los Territorios de Ultramar que posee el país administrado por el primer ministro Boris Johnson, los cuales también quedaron excluidos de lo acordado para terminar de concretar la salida de la UE.
Esto representa el pago de aranceles aduaneros y posibles restricciones a la venta de todo lo que se produce en las islas y desee ser comercializado en el conglomerado de países que forman parte de la comunidad.
A su vez, de acuerdo a lo descripto por varios medios británicos, esta disposición podría llegar a afectar a los ingresos que tuvo la administración de las islas por las licencias de pesca otorgadas a naves extranjeras, los cuales representaban alrededor del 50% de su recaudación fiscal anual.
EL PEDIDO ARGENTINO
Esta exclusión de las Islas Malvinas había sido solicitada por el canciller Felipe Solá el pasado 4 de noviembre durante una reunión que mantuvo con representantes de la Unión Europea realizado de forma presencial en la sede de la Embajada de Alemania en Buenos Aires.
Tras esa cumbre, la embajadora de la Unión Europea en Argentina, Aude Maio-Coliche, destacó: “La UE y sus Estados Miembros tienen una relación muy nutrida con la Argentina, que refleja la proximidad de sus ciudadanos, los intercambios culturales y comerciales, así como una visión compartida del mundo en el cual queremos vivir”,
“En este encuentro con el canciller Solá pudimos remarcar la voluntad de los europeos de seguir apostando por la Argentina y de construir una agenda compartida para una recuperación verde de la economía, tras la crisis de la Covid-19”, completó la funcionaria.
Fuente: Ambito