A partir del Lunes 5, y al menos durante las próximas semanas hasta el inicio del receso invernal, los estudiantes secundarios de la ciudad regresan a las clases presenciales todos los días de la semana. La modalidad de cursada ya se había flexibilizado semanas atrás para los alumnos de los restantes niveles, en tanto que para los más grandes regía un sistema bimodal, que combinaba la educación virtual con la asistencia a las escuelas.
Con esta medida, la mayoría de todos los alumnos porteños, excepto la educación para Adultos, Formación Docente, Institutos de Formación Técnica Superior, Centros de Formación Profesional (que solo realizan prácticas presenciales), cursará en sus respectivas escuelas, aunque la organización de cada grupo está a cargo de las instituciones según sus posibilidades.
Si bien la Ciudad había decidido restringir la asistencia de los estudiantes del nivel secundario a las instituciones por tratarse de jóvenes más independientes y con la posibilidad de trasladarse en el transporte público – considerado un espacio que podría favorecer los contagios de coronavirus -,el objetivo de liberar ahora esa medida es “evaluar”, de alguna manera, el aprendizaje de los adolescentes antes de que se dé por finalizado el primer cuatrimestre educativo. El marcado descenso de nuevos infectados en el distrito, que en pocas semanas pasó de 2700 casos promedio por día a unos 1100, acompaña la decisión oficial.
“Son quince días clave para que las chicas y chicos puedan reforzar sus aprendizajes en las aulas previo al cierre del cuatrimestre y las vacaciones de invierno”, aseguraron desde la Ciudad a LA NACION. Desde el Gobierno estiman que la circulación se incrementará un 16% estos días con la mayor movilización de estudiantes y docentes.
Un “segundo boletín” para los estudiantes secundarios que adeuden materias
A diferencia de lo ocurrido en 2020, esta vez los alumnos del nivel secundario porteño deberán aprobar materias y demostrar los conocimientos adquiridos para poder pasar de año. Para facilitar ese aprendizaje perdido, los estudiantes que adeuden materias tanto del año pasado como de 2019 contarán con un “segundo boletín” en el que harán un seguimiento de aquellas asignaturas pendientes. Al regreso de las vacaciones, con la información sistematizada de la primera parte del año las escuelas ofrecerán a los alumnos de nivel medio que deban materias un “Plan personalizado para el fortalecimiento de aprendizajes y acreditación”.
“Significa que va a haber días que los chicos se van a tener que quedar luego de clase, días que van a tener que ir horas extras para recuperar”, explicó la semana pasada la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, en diálogo con LN+.
Los jóvenes tendrán distintas instancias para recuperar los saberes: horas extras en la escuela, tareas adicionales y maestros particulares para el seguimiento son algunas de esas oportunidades, indicó la funcionaria. De acuerdo a la Ciudad, cuatro de cada 10 alumnos de la secundaria deben materias pendientes en proceso del 2020 y el número se duplica si se tienen en cuenta los estudiantes que ya traían materias pendientes o previas de años anteriores.
Fuente: La Nación