Los beneficios que trajo la reforma de Ganancias recién se efectivizaron en julio, cuando más de 1,2 millones de trabajadores dejaron de estar alcanzados por este tributo mientras que otros 250 mil que realizan gran cantidad de horas extra también vieron significativamente reducido el peso del impuesto en sus ingresos, por lo que representó un importante alivio para los trabajadores, al menos los que están en relación de dependencia.
Pero así como llegó la buena noticia en el segundo semestre del año, el rápido encarecimiento del costo de vida, muy superior al proyectado por Economía en el Presupuesto 2021, hizo erosionar esos beneficios porque para no perder más frente a la inflación, los gremios están revisando todas las paritarias y sellando acuerdos promedios del 45%, es decir, un 15% más de los acordado a inicios del año.
Así las cosas, en pocos meses nuevamente la enorme mayoría que había dejado de pagar Ganancias desde julio, volverá a ser alcanzada por el impuesto. Según supo minutouno.com, el presidente de Diputados, Sergio Massa, está planteando hacer la actualización que prevé la ley apenas terminen las revisiones de las principales paritarias.
Es que la reforma sancionada en abril por el Congreso contempla una especie de cláusula gatillo para que el Gobierno, por decreto, fije un nuevo piso ajustado en las paritarias y siempre contemplado que el grueso de los asalariados no tributen el impuesto, como es el espíritu con el que fue creado: que sólo los que tienen salarios realmente e ingresos realmente elevados, lo paguen.
“Se está trabajando en sacar el promedio de impacto de las reapaerturas de las paritarias a medida que van cerrando y ahí establecer el porcentaje. Massa ya lo habló con el Presidente”, confiaron a este portal.
Se estima que a fin de mes, cuando se completen las revisiones salariales del grueso de los gremios, se trazará el nuevo piso para beneficiar a la mayor cantidad de empleados. La idea es que rija a partir de septiembre. Desde el oficialismo son claros: “El objetivo es que la cantidad de beneficiados por la ley no se modifique”.
A la fecha, ya firmaron subas del 45% a enero o febrero 2022 los gremios de Comercio, Camioneros, Sanidad, Uatre, docentes porteños, y bancarios, entre otros. Eso equivale a un 15% más que lo convenido a principios de 2021, en promedio.
Cuando en enero se planteó una base de 150.000 brutos para no tributar Ganancias, se hizo pensando en un incremento en 2021 entorno al 30%. En el primer trimestre del año, los gremios cerraron entre 30% y 32%. Ahora si se toma en cuenta la nueva suba conseguida por los trabajadores estas semanas para fijar el nuevo piso de Ganancias, un 15% más son $172.500.
¿DE CUÁNTO SERÁ EL NUEVO PISO?
El equipo técnico que analiza este cambio confió a minutouno.com que el nuevo piso que se anunciará rondará entre los 175.000 y 185.000 brutos a partir de septiembre.
QUÉ FIJÓ LA NUEVA LEY DE GANANCIAS
La ley 27.617 eleva el piso del pago del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría a un mínimo de $150.000. Esto significó que más de 1.200.000 trabajadores en relación de dependencia cobrarán a partir de julio, en cinco cuotas consecutivas, la devolución retroactiva de lo descontado desde enero por el pago del gravamen.
Asimismo, los cambios en Ganancias excluyen al aguinaldo de los que cobran un salario bruto de $150.000; se eliminó el tope de edad para la deducción de los hijos con discapacidad; se incorporó la deducción por pareja conviviente, antes reconocida sólo para cónyuges, y se eximió al personal de salud de pagar el impuesto por horas extras o guardias hasta septiembre inclusive.
En el caso de las jubilaciones, no tributarán el gravamen quienes ganen por hasta ocho haberes mínimos, aunque tengan ingresos extras hasta los $164.000 anuales.
Además, se mantiene el beneficio del “22% adicional” en la región patagónica, pero con una carga tributaria menor que el resto de los contribuyentes, lo que “beneficiará a alrededor de 83.500 empleados y jubilados”.
Asimismo, se excluyó del pago de Ganancias al reintegro de gastos de guardería para los hijos e hijas de hasta 3 años, con un monto de hasta $67.000 por año, y lo mismo sucede con los gastos por equipamiento educativo, por el mismo monto.
Los bonos productivos quedaron exento de Ganancias al igual que la ropa, equipamiento y capacitación para el trabajador provistos por las empresas para uso exclusivo de las funciones del trabajador.
Para los sueldos en el rango de $ 150.000 y $ 173.000, unos 250 mil trabajadores que hacen horas extras según estimó Massa, esos salarios pagan Ganancias, pero para que el salto no sea abrupto, la AFIP estableció deducciones muy significativas.
Las jubilaciones de presidentes y vices ahora pagan el impuesto.
Los trabajadores del área de recolección de basura tampoco pagarán el impuesto por las horas extras.
Por otra parte, la normativa incrementó el umbral de ingresos y rentas a partir del cual los contribuyentes deben presentar la declaración jurada informativa para Ganancias y Bienes Personales a $ 2,5 millones.
El ajuste de Ganancias será anual por el índice salarial Ripte, pero se estipula la posibilidad de que el Gobierno fije por decreto un nuevo piso si en el año las paritarias hacen caer los beneficios de la reforma del impuesto.
Fuente: Minuto Uno