En medio de una semana en donde se instaló la discusión en torno a la inseguridad, tras el asesinato del kioskero, Roberto Sabo, el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, afirmó que seguirá en el ministerio tras las elecciones del 14 de noviembre: “No solamente me quedo, sino que tengo que redoblar los esfuerzos. Para un soldado rendirse no es una opción”.
Además agregó que “la permanencia mía o no, no tiene que ver con la gestión sino con cuestiones políticas. Situaciones como la de Roberto (el kioskero asesinado), aquellos que tenemos responsabilidad y compromiso sabemos que no nos podemos hacer los distraídos ni retirarnos”.
“No solamente me quedo, sino que tengo que redoblar los esfuerzos. Para un soldado rendirse no es una opción”, sentenció y agregó: “Imágenes como las que veo hace que tenga que guardarme todas mis diferencias políticas donde me las tenga que guardar”.
En ese sentido y en declaraciones al canal LN+, el titular de la cartera de seguridad se refirió a su situación en el gabinete y a su relación con el gobernador Axel Kicillof: “Estoy en la provincia de Buenos Aires porque tengo un Gobernador que por primera vez está haciendo los cambios estructurales que se deben hacer para llevar adelante una gestión”.
Además volvió a señalar sus diferencias que la ha manifestado públicamente: “Tengo diferencias que no solamente las he expresado y hecho públicas, desde las dos semanas que asumió el Presidente”.
El Destape anunció la continuidad del ministro de Seguridad el pasado 27 de octubre. Desde el entorno del ministro de Seguridad afirmaron a este medio en aquel momento que “Berni da las discusiones de cara a la gente porque así cree que debe ser”. Además afirmaron que “si él se quisiera ir, no usaría a intermediarios y lo diría a viva voz”.
Por otra parte, fuentes gubernamentales señalaron el mismo 27 de octubre a este medio que el ministro “seguirá en su cargo”. “Tiene una agenda programada hasta 2022, momento en que estarán los primeros policías con la especialización rural, siendo esa medida muy importante para Berni”, indicaron.
El caso del kioskero en Ramos Mejía
Respecto del asesinato del kioskero Roberto Sabo, el funcionario afirmó que “la gente lo sabe, hay una degradación social muy grande. Este chico que entró a la cárcel a los 22 años, salió a los 29”. “Era de Fuerte Apache, no sabe ni donde queda la comisaria, se subió a un remis, iba con la novia, le gustó el kiosco porque ella quería un osito; ni sabía dónde estaba, le dijo al remisero que lo espere que ya volvía, como éste se negó porque pensó que lo iban a engañar, le pagó $1.000 al remisero, se bajó y fue a matar a Roberto por un osito y unos chocolates”, continuó.
En cuanto al rol de la Justicia, Berni sostuvo que “puse el grito en el cielo. Si no hubiese sido por mis reclamos públicos, seguramente hubiesen seguido liberados presos. Liberaron presos y yo nunca estuve de acuerdo. Pero no es una decisión del Poder Ejecutivo, es una decisión del Poder Judicial”.
Fuente: el Destape