En el marco de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, se reforzarán los controles de alcoholemía con 15 puestos en puntos estratégicos de la Capital. El 21% de los siniestros fatales registrados están relacionados con el consumo de alcohol y en estas fechas especiales los excesos suelen provocar situaciones inesperadas.
En cinco años, la cantidad de controles realizados creció más de 163% al pasar de 119.772 verificaciones anuales en 2016 a 314.684 hasta el 15 de este mes; esta última cifra marcó un nuevo récord anual. De esos 314.684, 5343 fueron positivos (1,7%).
La cantidad de tests positivos se mantienen en los promedios habituales, en el orden del 1,7% del total realizado, con un dosaje medio de 0,88 g/l de alcohol en sangre. Y siguen siendo liderados por los hombres, que representan el 84,6% de los casos.
Desde la Secretaría de Transporte y Obras Públicas porteña, informaron que para optimizar los puntos de control se utiliza la metodología embudo. La misma consiste en encauzar el flujo vehicular tomando varios carriles de una avenida para poder verificar un mayor número de conductores y que todos los automóviles transiten a baja velocidad.
El igual que la legislación nacional (ley 24.449 y modificatorias), el Código de Tránsito y Transporte de la ciudad establece como límite máximo tolerado de alcohol en sangre 0,5 gr/l para choferes de vehículos particulares; se fija en 0,2 gr/l para conductores de motovehículos y en 0,5 gr/l para sus acompañantes, mientras que existe tolerancia cero para choferes profesionales (taxis, colectivos, camiones) y principiantes.
El Proyecto Integral de Convivencia Vial aprobado en las últimas semanas, que propone inhabilitar a quienes manejen alcoholizados y mejorar el proceso de habilitación de los conductores, está en proceso de reglamentación y se prevé su implementación en las primeras semanas de 2022.
En la actualidad, cuando el test de alcoholemia arroja un resultado mayor al permitido se labra una contravención, se retiene la licencia del conductor (se otorga una licencia provisoria por tres días corridos) y se remite el vehículo a una playa de acarreo. Además, se imprimen dos tickets con el resultado y se procede al labrado de actas e informes.
El contraventor deberá presentarse en la fiscalía dentro de los cinco días hábiles de labrada el acta contravencional para regularizar su situación. Al momento del control, no se puede ceder el volante en caso de ir con un acompañante.
Las multas
- Alcoholemia positiva (contravención): a partir de la última modificación del Código Contravencional, desde el 1° de noviembre de 2018 quienes conducen superando los límites permitidos de alcohol en sangre serán sancionados con entre 150 y 1000 unidades fijas (UF); esto equivale hoy a entre $7950 y $53.000 (cada UF es de $53).
- Negativa a someterse a control: el conductor de un vehículo que se niegue a someterse al control de alcoholemia, estupefacientes u otras sustancias similares será sancionado con una multa de $15.900 (300 UF), con agravante para el transporte público ($31.800 o 600 UF).
- Contribución a conducción peligrosa: el acompañante en un motovehículo que supere los límites permitidos de alcohol en sangre será sancionado con multa de $5300 (100 UF).
Fuente: minuto Uno