Educación, investigación y el mundo empresarial se integrarán en el nuevo proyecto de la Ciudad de Buenos Aires: el Parque de la Innovación. Ubicado en Núñez -en la zona entre las avenidas Del Libertador, Udaondo y Lugones- este buscará impulsar la ciencia y la tecnología, la generación de la innovación, conocimiento y talento y promoverá la radicación de las entidades dedicadas al emprendedurismo en sus instalaciones.
Su misión, entonces, es proveer un espacio donde se puedan potenciar las actividades de emprendedores, estudiantes e investigadores, facilitando el encuentro entre ellos y generando sinergias con instituciones innovadoras del país y del mundo.
La iniciativa surgió a partir de la sanción de la Ley 5.558 en 2016: será un espacio con 32 parcelasen 12 hectáreas destinadas a proyectos relacionados con la innovación pero también habrá emprendimientos inmobiliarios “Tenemos 360.000 m² aprobados para construir, de los cuales 120.000 m² tienen que ser destinados para la innovación, la mitad espacio público y la otra será destinada a obra privada”, comenta el ministro de Desarrollo Económico y Producción, José Luis Giusti. “El Distrito Tecnológico en Parque Patricios potenció mucho la actividad económica de la industria del conocimiento en la Ciudad de Buenos Aires y nos dimos cuenta de que faltaba algo que lo vincule con el mundo académico, con el mundo más de la innovación”, agrega. En otras palabras, se busca que el Parque facilite la interacción de actores claves del ambiente de la innovación.
El modelo de inspiración fue de el de los más de 500 parques científicos-tecnológicos que existen en el mundo “Desde la Ciudad trabajamos mucho para que el talento se quede en la ciudad y las empresas sigan radicadas en la Argentina. Hoy competimos con Montevideo, Bogotá, San Pablo y creemos que este tipo de parque y el Distrito Tecnológico ayudan a generar un ecosistema que ayuda a que las empresas se radiquen en Buenos Aires”, enfatiza el funcionario e insiste en la idea de formar un contexto donde exista una relación entre la academia, la investigación y la empresa: “Esto ayudará a que haya más unicornios en la Argentina y que se siga posicionando a Buenos Aires como la ciudad del conocimiento. Ahí la Ciudad pone a disposición la tierra para eso”.
Para cuando el proyecto esté en funcionamiento, sus autoridades esperan que allí se movilice una actividad económica cercana a los US$1000 millones anuales. La estimación es que por el parque en el que hasta hace un año funcionaba el Tiro Federal, transitarán aproximadamente 30.000 personas por día: entre 2000 y 3000 personas estarán abocados a la docencia o a la investigación -tanto en las instituciones educativas como en las empresas privadas- mientras uniéndose a los más de 11.000 que trabajarán habitualmente allí.
“El Parque tiene un atractivo especial por el lugar estratégico de la Ciudad en el que se desarrolla y por los actores presentes en su zona de influencia”, explica Luis María Bullrich, titular del Parque de Innovación. El funcionario se refiere a la cercanía del predio con entidades educativas como la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, la Universidad Di Tella, la Escuela ORT, Digital House y la Universidad Abierta Interamericana, por nombrar algunas. De hecho, la educación es uno de los pilares de la innovación que predica el proyecto, ya que por ley la Ciudad concesionará una sucursal de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) por 100 y 50 años respectivamente. Por otro lado, “vemos que hay mucho interés de las universidades privadas”, resalta Giusti. Tal es así que el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) adquirió dos parcelas para instalar allí su sede principal.
En números, se estima que circularán en el nuevo barrio cerca de 18.000 estudiantes. Estos se adherirán al marco de las instituciones adyacentes, sumando un total de 80.000 alumnos en la zona. En tanto, de las más de 6000 personas que residirán en el nuevo barrio, se anticipa que más de la tercera parte serán estudiantes quienes se alojarán en los proyectos residenciales diseñados para ese segmento.
Hasta el momento, se vendieron cinco parcelas y proyectan poner en venta otras ocho antes de que termine el año. Los terrenos se adquieren por un proceso de subasta pública, realizado por el Banco Ciudad. Grupo Sancor es una de las compañías que ya aseguró su lugar en el Parque: construirá un proyecto de coworking. El plan es, para fines del 2022, tener todos los terrenos vendidos.
La salud será otro de los focos del proyecto. “Apuntamos a contar pronto con empresas de investigación y desarrollo del área de salud, con otras instituciones de educación y compañías tecnológicas para, de esta manera, completar el ecosistema de talento, trabajo y desarrollo que logra que la innovación fluya”, señala Bullrich. En los planes está la posibilidad de sumar un centro médico u odontológico, un instituto de salud mental, una clínica, un sanatorio, una maternidad, institutos privados, centros laboratorios y un centro de reproducción médicamente asistida, además de un laboratorio de análisis, un espacio de trabajo colaborativo, un centro de procesamiento de datos y tabulaciones y actividades de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC).
Cómo será
El diseño del espacio está a cargo del arquitecto Alberto Varas, el estudio que ganó el “Concurso Nacional de Ideas Plan Maestro Parque de Innovación”, realizado por la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires junto con el Gobierno de la Ciudad en 2016.
“Habrá calles, plazas y edificios en donde funcionarán oficinas vinculadas a la innovación y la tecnología del Gobierno porteño y vamos a tener un anfiteatro. Cada uno de los edificios en su planta baja puede tener locales comerciales y gastronómicos y se va a transformar en un nuevo barrio de la ciudad”, describe Giusti, al tiempo que aclara que el 45% de los espacios públicos estarán destinados a espacios verdes.
Por otra parte, la Ciudad está haciendo una fuerte inversión para implementar tecnología en las calles y en la movilidad dentro del parque para ofrecer soluciones inteligentes en el espacio público. Para finalizar, otro tema clave es que las construcciones serán sustentables y no sólo tendrán terrazas verdes sino que también continuarán la vegetación nativa de las plazas.
Fuente: La Nacion