Cuba vive una de las peores crisis energéticas de su historia reciente, con más de tres días de apagón totalque afectan a los 11 millones de habitantes de la isla. El país quedó sin suministro eléctrico debido a una desconexión completa del sistema, lo que generó una situación desesperante para la población en medio de la amenaza inminente del huracán “Oscar”.
El presidente cubano, Rafael Díaz Canel, expresó que “no habrá descanso hasta el restablecimiento del sistema energético”, subrayando la gravedad de la situación. Según explicó, la causa principal de este colapso energético es el bloqueo económico impuesto por Estados Unidos desde hace más de 60 años, lo que impide la compra de repuestos y equipos necesarios para mantener la red eléctrica en funcionamiento.
Una falla que agravó la crisis
La crisis energética de Cuba no es nueva. Durante años, los cortes de electricidad diarios han afectado la vida de los cubanos, quienes sufren apagones de varias horas cada día. Sin embargo, esta vez la situación es más grave. El viernes pasado, una falla en la central termoeléctrica Antonio Guiteras provocó una desconexión total de la red eléctrica, dejando a todo el país sin luz.
Aunque se lograron reparaciones parciales que permitieron reestablecer temporalmente el suministro en algunas regiones, una nueva falla el domingo volvió a sumir a la isla en la oscuridad total. “Cuba vive una situación excepcional”, admitió Díaz Canel en un mensaje televisado, donde también reconoció que será extremadamente complejo volver a conectar el sistema eléctrico en su totalidad.
El bloqueo, en el centro de la crisis
Para el Gobierno cubano, el principal responsable de la crisis energética sigue siendo el bloqueo económico de Estados Unidos. Díaz Canel y su ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, señalaron que las sanciones impiden acceder a los mercados internacionales para comprar piezas de repuesto esenciales para el mantenimiento del sistema eléctrico. “Es una demostración más de todos los problemas que nos causa el bloqueo”, afirmó el presidente.
Aunque Cuba mantiene relaciones comerciales con países como Rusia, Venezuela, Irán y México, Díaz Canel destacó que la “persecución financiera y energética” a la que está sometido el país ha complicado enormemente la posibilidad de modernizar su infraestructura eléctrica, que sigue siendo insuficiente para abastecer a la población las 24 horas del día.
Medidas de emergencia y más restricciones
Ante la gravedad de la situación, el Gobierno cubano implementó medidas de emergencia. Según el diario oficial Granma, se ordenó la suspensión de todas las actividades “no imprescindibles” hasta al menos el miércoles, aunque es probable que esta medida deba ser extendida. También se suspendieron las clases en todo el país.
Estas restricciones se suman a las ya complejas condiciones que enfrenta la población cubana. Los continuos apagones deterioraron la calidad de vida de los ciudadanos, quienes dependen de las raciones de alimentos distribuidas por el Gobierno. Ahora, sin energía eléctrica por más de tres días, las heladeras han dejado de funcionar, lo que imposibilita conservar alimentos frescos.
Un pueblo en penumbra y el temor del huracán “Oscar”
El apagón total generó protestas en varias ciudades de Cuba. Con cacerolazos y manifestaciones, los ciudadanos han expresado su frustración ante la falta de soluciones concretas.Nadie sabe cuándo podrá volver a conectarse todo el sistema.
Mientras tanto, la población se prepara para la llegada del huracán “Oscar”, que podría agravar aún más la crisis. Con los sistemas de energía colapsados, el impacto de un fenómeno climático de tal magnitud podría ser devastador para una isla que ya sufre las consecuencias de la desconexión total.
En medio de la incertidumbre, muchos cubanos comienzan a añorar los días en los que al menos podían contar con electricidad por algunas horas. Ahora, después de más de 72 horas sin luz, todo lo que tienen es la luz del sol.
Fuente: Cronica