Primero fue el decreto que paralizó la reforma de la Justicia en la Ciudad y protegió a Clarín, después fue el anuncio de un Indec PRO en la Ciudad, sin la contaminación que tienen los índices oficiales. Y en los próximos días el Gobierno de la Ciudad podría lanzar una tercera “embestida” contra el Gobierno Nacional.
Es que dentro del macrismo aseguran que les funcionó bien la política de “anuncios para todos” y ahora van a tratar de sostenerla en el tiempo, sobre todo en los últimos meses, antes de que se dispare la campaña electoral, hacia octubre.
“Ya nos mostramos diferentes en temas de Justicia y de Economía, ahora falta Seguridad y Desigualdad”, confirman en el Gobierno, que anunciará una la articulación de una red de políticas sociales tendientes a diferenciarse de la administración de Cristina Fernández. Irá, confirman, en la línea de las palabras del Jefe de Gobierno durante la apertura de las sesiones ordinarias de la Legislatura, en Marzo.
Dinamita PRO.
“Gabriela (Michetti) es una gran candidata”, sorprendió hoy Larreta, el Jefe de Gabinete PRO que mantiene desde que llegó al espacio, una histórica pelea con la candidata que mejor mide del macrismo. Discute su gestión, como plataforma, con el carisma de ella, que muchos le critican la poca intensidad de trabajo.
Es que los tiempos electorales se acercan y Gabriela será otra vez la cara del PRO en las elecciones. “Lavagna ya fue, es un pavo real, que al otro día de ganar las elecciones, arma su propio espacio y nos deja en banda”, sintetiza un ministro PRO.
Ocurre que las negociaciones con el ex ministro de economía de Néstor Kirchner se desplomaron como el acuerdo de precios K. Y el Gobierno porteño teme perder caudal de votos de la mano del economista. Una guerra en las urnas Michetti-Lavagna, no sería buena para ninguno. Incluso para el ya perdedor de cinco elecciones, Daniel Filmus. A él, pobre, también le sacaría cauda.
Hasta hace días, venían avanzando las negociaciones entre Macri y Lavagna, pero su acercamiento al intendente de Tigre, Sergio Massa, molestó al propio Jefe de Gobierno y se terminó el acuerdo antes de que nazca. Amén de que el economista pedía muchos lugares en las listas de diputados y controlar varios ministerios.
El plan Delta.
La cúpula del macrismo todavía cree que podrá sellar una coalición electoral con Massa para las próximas elecciones de medio término. El hombre, sólo al lanzarse como candidato (y anunciarlo), hace temblar a los demás jugadores. Es un pac-man que le roba votos al centro-derecha (De Narváez), al PRO, y al kirchnerismo. Y al peronismo.
Ayer, en declaraciones en Radio La Red, el propio Larreta reconoció que mantiene con el intendente de Tigre una amistad de hace 15 años. Son muchos dentro del macrismo que critican sus reuniones privadas y negociaciones “paralelas” a las oficiales con Massa. Después de todo, Larreta aspira a Gobernar la Ciudad en 2015 y necesita respaldo. Además de ser de la mesa chica del PRO, ¿podría sumarse a una eventual (y todavía poco posible) alianza entre Scioli y Massa? Larreta sería, claro, la cara de ese acuerdo en la Ciudad.
hay que entender cáda manifestación de este espacio en el marco de una campaña política que se viene.