La aparición de un bicitaxi en las calles de Buenos Aires generó una enorme polémica sobre si este tipo de vehículo está habilitado para circular por la Ciudad. Sobre todo, los taxistas pusieron el grito en el cielo ante la novedad.
Hernán Torres Moreno, creador del bicitaxi, aseguró en el programa Baires en Bici, por Radio Ciudad, que luego de que el vehículo fuera decomisado por una grúa, tuvo una charla con autoridades del gobierno porteño, con las que llegó al acuerdo de que puede subir pasajeros pero sin cobrar una tarifa establecida, sino prestar el servicio “a voluntad”.
Torres Moreno contó que, antes del inconveniente, el bicitaxi estaba cobrando 12 pesos las 10 cuadras y luego un peso por cuadra. “Queremos orientarnos a la gente que no puede pagar un taxi”, explicó. Aclaró además que, si bien no entregaba facturas, sí tiene un seguro que protege al conductor, a los pasajeros y a terceros.
“Mi idea es que sirva como transporte público, como ocurre en Bogotá, Colombia. Comenzó como aquí, con una bici, y se multiplicó muchísimo. La alcaldía de allá empezó a hacer multas y a confiscarlos. Entonces se agruparon, lo llevaron a la Justicia y después de muchos años de pelea, finalmente la Corte Suprema de Colombia dictaminó que no podían prohibirlo, sino regularlo. Aquí no está regulado pero es probable que termine igual”, afirmó el creador del bicitaxi en la misma entrevista.
“El proyecto tiene más de dos años. Lo primero que hice fue asesorarme con una abogada, que me dijo que no era ilegal pero no estaba reglamentado, por lo que iba a depender de la voluntad de las autoridades. Entonces presentamos el proyecto al Gobierno de la Ciudad, como no avanzó después de dos años decidimos ponerlo en la calle para testear la reacción de la gente. No me imaginaba semejante repercusión”, señaló Torres Moreno, que buscará impulsar un proyecto en la legislatura porteña para que todo sea legal.
“Cuando vino Hernán a decirme sobre el laburo yo le dije que sí. ¡Me pareció espectacular! Antes que cartonear prefiero pedalear, porque es más limpio y más liviano, porque no llevás tanta gente, solamente dos, nomás. Gracias a eso estoy conociendo la ciudad, el centro de Buenos Aires, Tribunales, todo Palermo, el Rosedal. Me pone contento, porque aparte es liviano, porque tiene cambios, freno a disco, bocina, tiene todo”, explicó.
Además, el bicitaxi cuenta con dos cascos para los pasajeros, que viajan enfrentados. El vehículo es lo suficientemente angosto como para circular por un carril de la ciclovía sin molestar al ciclista que viene de frente.
Para los que hablan de “trabajo esclavo”, Jonathan responde: “En el carro los cartones pesan entre 80 y 90 kilos y a veces hasta 130 cada bolsón. Y yo a veces llevo cinco. ¿Sabés cómo transpirás? Para mí llevar dos pasajeros no es nada”.
“Más que crear una flota de bicitaxis, mi idea es que los cartoneros de la ciudad de Buenos Aires tengan una opción laboral, ese es el objetivo del proyecto. No lo veo como una empresa, es un emprendimiento social. La idea es que todos los cartoneros que quieran puedan trabajar de esto”, cerró Torres Moreno.
Fuente: La Nación