El tarifazo será la bandera de un nuevo paro nacional de la CGT, el quinto en la gestión de Mauricio Macri, pautado para mediados del mes que viene, esta vez por 36 horas y con movilización. Así lo resolvió ayer la “mesa chica” de la central obrera y lo propondrá al Consejo Directivo el jueves de la semana que viene junto con otras acciones de protesta contra el Gobierno como una marcha y cacerolazo frente al Congreso el día del tratamiento en la Cámara de Diputados del Presupuesto 2019.
La CGT, además, se atajó frente a un posible llamado al diálogo por parte del Ejecutivo con una serie de condiciones: suspensión de despidos hasta marzo, reapertura general de paritarias sin topes, aumento de emergencia a los jubilados y un freno a las tarifas del transporte público. De este modo la organización buscará recobrar protagonismo tras la última huelga del 25 de septiembre pasado a la que le siguió una serie de cimbronazos internos entre los que se destacó la salida del triunvirato de secretarios generales del portuario Juan Carlos Schmid.
Los principales referentes de la central se reunieron ayer por varias horas en la sede del gremio de estatales UPCN. Estaban los dos jefes supervivientes de la conducción, Héctor Daer y Carlos Acuña, junto al dueño de casa, Andrés Rodríguez, el mercantil Armando Cavalieri, Gerardo Martínez (albañiles, Uocra), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Antonio Caló (metalúrgicos, UOM), Roberto Fernández (colectiveros de UTA), Omar Maturano (maquinistas, La Fraternidad), el panadero Abel Frutos y Jorge Sola, de los empleados del seguro.
“Si hace falta a mediados de noviembre haremos otro paro nacional por 36 horas y con movilización” le dijo anoche a este diario Acuña. El dirigente contó que en el encuentro se resolvió poner a los abogados de la CGT a analizar el nuevo aumento tarifario habilitado por el Gobierno y en particular el del servicio de gas que incluye el pago de un retroactivo a favor de las compañías productoras en compensación por la devaluación del peso. “Vamos a conversar de esto con las asociaciones de defensa del consumidor y los órganos públicos competentes”, añadió el gremialista de las estaciones de servicio.
Los referentes confirmaron ayer que irán el 17 de octubre a Tucumán para participar de un acto en conmemoración por el “día de la lealtad peronista” organizado por el gobernador provincial, Juan Manzur, junto al gastronómico Luis Barrionuevo, factótum de la última versión de las 62 Organizaciones peronistas. La convocatoria tiene como eje la intención de unificar las variantes del peronismo que involucran tanto a gobernadores como a bloques legislativos y gremialistas con la exclusión de Cristina de Kirchner y sus aliados. En ese sentido es la contracara del Frente Sindical por el Modelo Nacional que auspicia Hugo Moyano junto con la Corriente Federal de Trabajadores y el sindicato de mecánicos (Smata), cercano al kirchnerismo.
“El acto en Tucumán va a ser importante porque esa provincia es la cuna de la independencia y desde allí Juan Perón, en 1949, declaró la independencia económica de la Argentina. Hoy queremos repudiar la dependencia económica del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI)”, amplió Acuña.
Sobre las condicionalidades fijadas para una eventual convocatoria del Ejecutivo a una instancia de diálogo el sindicalista aclaró que aún no se produjo un acercamiento en ese sentido. El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, había amagado semanas atrás con una convocatoria a la CGT pero el plan quedó congelado con el último paro de actividades y hasta ahora no pareció reactivarse.
Fuente: Ámbito Financiero