Nicaragua no tiene paz

Casi tres meses de protestas y disturbios han puesto contra las cuerdas al Gobierno de Daniel Ortega. Estas son las claves de la rebelión ciudadana

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¿Cuándo y por qué se iniciaron las protestas?Estudiantes salieron a la calle el 18 de abril para protestar contra la reforma del sistema de seguridad social, impuesta por el gobierno de forma unilateral y que gravaba a trabajadores y empresarios con el objetivo de tapar los millonarios agujeros creados por la corrupción. Pese a la retirada de la ley, la represión violenta contra los jóvenes provocó que se transformase en una rebelión popular contra los abusos del clan de los Ortega, reelecto en 2016 en unas elecciones con parecidos déficits democráticos que las venezolanas de este año. ¿Cuántas víctimas mortales suma el conflicto?Al menos 270 personas han muerto en 85 días, según el último balance realizado por Human Rights Watch, que también suma más de 1.500 heridos. Organizaciones locales aumentan la cifra por encima de las 300 víctimas mortales. La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos denunciaron en las últimas horas la masacre del pasado fin de semana, cuando tropas policiales y huestes paramilitares unieron fuerzas para la toma a tiro limpio del municipio de Carazo, donde los opositores se habían parapetado detrás de las barricadas. Murieron al menos 20 personas. ¿Qué exigen los rebeldes?La Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, conformada por estudiantes, empresarios, organizaciones sociales y los restos de la oposición, negocian con el gobierno el adelanto de las elecciones presidenciales de 2021 a 2019. Ortega, que había ofrecido a mediadores de EEUU y de la OEA este adelanto, dio marcha atrás el pasado sábado y ahora asegura que completará su mandato. Según las encuestas, alrededor del 70% de los nicaragüenses quieren su salida. Ortega encabezó el gobierno sandinista durante 11 años el siglo pasado y en esta segunda etapa lo hace desde 2007, gracias a los acuerdos alcanzados con el opositor Arnoldo Alemán, condenado por corrupción. ¿Cuál es el papel de la Iglesia Católica?La Conferencia Episcopal ejerce como testigo y mediadora en la mesa del diálogo, en la que el gobierno ha incumplido de forma reiterada las peticiones para que cese la represión. Pero además los obispos católicos, en especial monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, se han convertido en símbolos de la protesta nacional y en defensores de los jóvenes que resisten en las calles. ¿Cuál es la estrategia gubernamental?El gobierno de Ortega y de su mujer, la vicepresidenta Rosario Murillo, se apoyan en las fuerzas policiales, las turbas paramilitares y las Juventudes Sandinistas para reprimir a los rebeldes, a quienes acusan de ser terroristas que intentan un golpe de estado. También cuenta con el apoyo de sus aliados Cuba y Venezuela, que además ha puesto a su disposición el mismo aparato de propaganda que actuó contra las protestas antigubernamentales de 2017 en Venezuela. Ortega ha copiado la hoja de ruta aplicada por Nicolás Maduro el año pasado, basada en el aumento de la represión, el mantra del diálogo y la niebla de la propaganda.

Fuente: www.elmundo.es

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