Gabriela Michetti volvió a complicarle el armado electoral a Mauricio Macri. Tras dinamitar la estrategia de casi todo el PRO de postularse a diputada nacional en la provincia de Buenos Aires, ahora la ex vicejefa rechaza el acuerdo que intenta tejer el jefe de gobierno con Roberto Lavagna.
Macri se entusiasmó con que el ex ministro de Economía de Néstor y Cristina Kirchner encabece la lista de senadores por la Capital Federal Pero Lavagna le puso condiciones al jefe de Gobierno y advirtió que no quiere se la pata peronista del Pro.
El economista aceptaría formar un frente con el macrismo sólo si va primero en la lista y no detrás de Michetti, en un armado de tinte peronista.
Pero Michetti, que considera que la pelea por el Senado es una batalla clave para aspirar a suceder a Macri en la jefatura de gobierno en 2015, no quiere saber nada con ser segunda de Lavagna ni de nadie.
En ese sentido, desde el entorno de Michetti señalaron a LPO que la diputada “quiere internas desde el primer día” y que aún no definió si será candidata este año. “Si se decide, lo hará a través de internas”, advirtieron sus allegados y remarcaron que nadie le va a imponer un lugar en una lista si no es a través de una interna abierta.
La postura de Michetti es sostenida por el presidente del bloque de diputados del PRO, Federico Pinedo, que como explicó este medio está furioso con la irrupción de Lavagna en la estrategia porteña de Macri, puesto que aspira a secundar a la ex vicejefa en la lista e ingresar al Senado.
Pinedo es quien fogonea también las internas abiertas que un sector del PRO quiere evitar pero que hoy mismo el propio Macri ratificó. “Tiene que haber, hay muchos dirigentes que aspiran a la senaduría y la diputación”, dijo el jefe de gobierno por Radio 10, sin mencionar a Lavagna, que de ninguna manera participaría de una interna del PRO.
Sin embargo, en otros sectores del PRO no son tan contemplativos con la postura de Michetti. Algunos colaboradores de Macri siguen molestos por la decisión que tomó Michetti el año pasado: aseguran que la diputada no está en condiciones de negociar y que debería conformarse con renovar su banca de diputada.
En ese sentido, en el PRO ya iniciaron conversaciones con la ex ministra de Salud de Néstor Kirchner, Graciela Ocaña, pensando en una fórmula con Lavagna. “No tenemos mujeres de renombre y una fórmula Lavagna-Ocaña demostraría la predisposición de Mauricio a armar frentes”, señalan en el partido amarillo.
Fuente: La politica