Con el último aumento de las naftas, se actualizaron en la Ciudad de Buenos Aires los montos aplicados a las infracciones de tránsito, que se incrementaron un 21 por ciento. La administración de Mauricio Macri llevó de $5,30 a $6,40 el valor de la Unidad Fija, indicador que se basa en el precio del combustible y que se toma como referencia para las multas. Por este motivos, la penas económicas por curzar un semáforo en rojo aumentará hasta un máximo de 9.600 pesos.
Sin embargo, el endurecimiento en las sanciones económicas no se refleja de igual manera en los controles de tránsito efectivos. La Policía de Tránsito en el ámbito metropolitano prácticamente desapareció en los últimos años y en las calles porteñas se impone la impunidad: cada vez se labran menos actas, a pesar del aumento de la frecuencia y gravedad de los accidentes, y del importante aumento del caudal vehicular, luego de las ventas récord de automotores de la última década.
Los números de la Dirección General Administrativa de Infracciones del Ministerio de Justicia porteño revelan que las actas de infracciones se desplomaron a niveles irrisorios. El año pasado, se elaboraron apenas 539.739 actas, un 76% menos que en 2012, cuando fueron 2.274.118, según publicó el diario Clarín.
EN LA CIUDAD SE MULTA UN PROMEDIO DE 26 CRUCES DE SEMÁFORO EN ROJO POR DÍA, UNA CIFRA IRRISORIA
Más allá del lógico efecto disuasorio que ejerce el encarecimiento de las multas a un potencial infractor, para la ONG Luchemos por la Vida, las cifras ponen de manifiesto la carencia de controles. En 2013, las autoridades registraron 215.219 infracciones por exceso de velocidad, cinco veces menos que el año anterior. Algo similar sucede con las 147.093 actas que labraron por mal estacionamiento, un número cuatro veces inferior al de 2012. Por pasar un semáforo en rojo, cayeron de 48.729 a tan sólo 9.530, es decir, unas 26 violaciones de la señal por día, cuando esta es una de las infracciones más graves y reiteradas. Sorprende en lo que respecta al no uso de casco en las motos: directamente no hubo infracciones.
La caída de las actas es un fenómeno que se reproduce desde años anteriores. En 2009, se elaboraron 4.071.950, mientras que 2010 fueron 2.874.526.
Desde ahora, pasar un semáforo en rojo tendrá una sanción que va de los $1.920 a los $9.600, dependiendo de las circunstancias de la infracción. Estacionar equivocadamente tendrá un castigo entre los $640 hasta los $1.280 – si se bloquean rampas de discapacitados o paradas de colectivos-, mientras que las multas por exceso de velocidad oscilan entre $960 y $25.600, si el auto circula a más de 140 kilómetros por hora.
Los motociclistas que no usen casco y los conductores que tampoco tengan puesto el cinturón de seguridad deberán abonar desde $640. En tanto, usar el teléfono celular para enviar mensajes de texto o hablar llega a $1.280; tapar la patente para evitar fotomultas cuesta $3.200, o cruzar la barrera de tren baja está entre $2.560 y $12.800. Evitar un control de alcoholemia puede significar $1.920. A la hora de afrontar los pagos, rige un descuento del 50 por ciento para los infractores que se presenten a liquidarlos voluntariamente.
LAS ACTAS LABRADAS EN 2013 SE REDUJERON A UNA CUARTA PARTE DE LAS REGISTRADAS EN 2012
En qué se basa el incremento
Los valores en las multas se modificaron luego de que la Subsecretaría de Justicia publicó el último aumento de la Unidad Fija, ante las variaciones en el precio de los combustibles. La resolución utiliza como referencia la nafta premium, que en el ACA se vendía a $12,89 el litro. Como el Código de Faltas establece que 1 UF equivale a medio litro de esa nafta, la cuenta parte a $6,44, que al redondearse a favor del infractor, queda a $6,40.
La Unidad Fija no aumentaba desde el 24 de febrero pasado, cuando ese incremento la llevó a 5,30 pesos. Sin embargo, cabe señalar el cálculo de la nueva suba no computa el último alza del 4% de los combustibles, que llevó el precio de la premium a $13,41.
Fuente: Infobae